Desde Nuevo Encuentro, Guillermo Guerín Daniel Caferra realizaron un pedido para quitar las cámaras de seguridad que hay en ocho escuelas de la ciudad. En un diálogo que mantuvo con REALPOLITIK, el candidato a intendente aseguró que ese sistema de vigilancia es carcelario y espera que la Justicia tome cartas en el asunto.  

A continuación, la entrevista completa.  

RP.- Junto al concejal Daniel Caferra pidieron que se quiten las cámaras de seguridad que hay en algunas escuelas, ¿cuál es el motivo?

Para la mayoría de los platenses esto fue una sorpresa muy desagradable; hace unos días nos enteramos a través de los docentes y padres que hay ocho escuelas en La Plata que cuentan con un sistema de vigilancia interna a través de cámaras de seguridad puestas internas con un monitoreo en la oficina de la directora.  

A los dos días que nos enteramos de esto, vimos los afiches promocionando más cámaras en las escuelas como parte de las promesas de campaña del intendente actual. Esos anuncios generan una confusión enorme, porque no se sabe si las cámaras están adentro o afuera.  

El concejal Caferra se acercó a algunas de las escuelas y se encontró con la sorpresa desagradable de confirmarlo. Nos parece que esto invade el espacio íntimo y altera la necesaria atmósfera de tranquilidad que se requiere en las instituciones educativas y bajo ningún punto de vista las cámaras pueden estar inscriptas bajo alguna estrategia de administración interna.  

Empresas que cuentan con cámaras de vigilancia en el exterior de sus instalaciones han pagado al municipio para que su señal se conecte con la Secretaría de Seguridad Publica y así, en el momento en que se suscite algún hecho delictivo, los elementos preventivos respondan a tiempo.

El alcalde Ricardo Sheffield Padilla aseguró que el sistema de video vigilancia del municipio tiene la capacidad para captar la señal de 10 mil cámaras al mismo tiempo, sin embargo, hasta el momento sólo trabaja con poco más de mil

A los empresarios que contratan este servicio se les garantiza una respuesta inmediata por parte del Centro de Comando, Control, Comunicaciones y Cómputo (C4), que es donde se administran las telecomunicaciones y los sistemas informáticos que están a disposición de las corporaciones de Seguridad Pública.  

Así, al conectarse a dicha red, "en menos de tres minutos podemos estar presentes (en caso de un delito ocurrido en alguna de las empresas que cuente con la video vigilancia o en el exterior) y adicional a ello la presencia policial es con las medidas y equipamiento necesario para la situación", dijo.

En León más de mil cámaras de seguridad instaladas en empresas privadas están enlazadas al sistema de la Secretaría de Seguridad Pública municipal.

Se trata de empresas de todos los giros que abarcan los sectores industrial y comercial, que además de resguardar el negocio permiten una vigilancia audiovisual de calles perimetrales a los establecimientos, informó ayer el alcalde Ricardo Sheffield.

“Les garantiza una respuesta inmediata por parte de nuestro Centro de Control, del C4, de forma tal que en menos de tres minutos podamos estar presentes, y adicional a ello la presencia es ya con las medidas y equipamiento necesario para la situación”, explicó.

El Alcalde se refirió al problema de seguridad que afecta a los empresarios zapateros como una situación latente para la que urge extremar precauciones.

Esto tras la modificación de rutas en la venta y distribución de calzado producido en la ciudad.

Actualmente el Sistema de Vigilancia Virtual conectado al C4 tiene capacidad para 10 mil cámaras, por lo que quienes aún no cuentan con el servicio pueden solicitarlo en la Secretaría de Seguridad Pública; los empresarios pagan sus cámaras y un costo por subir las imágenes al sistema de Seguridad municipal.

“Yo les quiero agradecer a los empresarios porque se ayudan a sí mismos, pero también ayudan a toda la ciudad”, dijo Sheffield.

Los primeros pasos del protocolo de seguridad para la actividad turística local, anunciado hace algunas horas por el Gobierno provincial, ya dejaron ver serias incongruencias. Al menos eso es lo que se refleja desde el Ministerio de Turismo y Cultura. Por una lado se busca consensuar un plan de seguridad que incluye a la cadena hotelera en lo referido al control de huéspedes y registros de viajes, pero por otro se lanzaron notificaciones ordenando el “cese inmediato” de las actividades en hoteles que no tengan todos los papeles en regla. Estas notificaciones, que fueron enviadas a hospedajes de distintas categorías, llegaron sin preaviso por parte del área de Fiscalización de Turismo, a cargo de Rebeca Arancibia. El documento fue enviado sin especificar destinatarios (ver facsimil) y tampoco figura en ellos un plazo para cumplir con los papeles requeridos, que son los que se exigen al momento de la habilitación.

Varios de estos hoteles notificados, no solo tienen personas alojadas, sino también reservas para los próximos días y meses, por lo que la medida dentro del protocolo de seguridad, aparece arbitraria y extemporánea, luego del escándalo mundial que provocó el asesinato de las turistas francesas en la Quebrada de San Lorenzo. El Gobierno pasó por alto este hecho, ya que ni siquiera lo mencionó al momento de confirmar el plan de seguridad.

Además de la fuerza de reacción inmediata de la que dispone el gobierno del estado y municipal, ya fueron colocadas 70 cámaras, adicionales y en breve habrá de instalarse 200 más, las cuales serán distribuidas en la franja turística y la zona conurbada de este destino de playa.

“Además hay espejos, es decir las mismas imágenes que se reciben en el C-4, serán vistas por autoridades de la IX Región Militar, de la VIII Región Naval y de la Policía Federal Preventiva, con lo cual se podrá reaccionar de inmediato, y con ellos se refuerzan las medidas de seguridad”, explicó el Secretario de Seguridad Pública del Estado, Ramón Almonte Borja.

Además se indicó que se pretende ampliar la colocación de cámaras de vigilancia a otros municipios del estado, pero para el puerto de Acapulco, serán mil.

FUENTE: www.milenio.com