La Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) investigó, en los diez años precedentes, solamente diez delitos que tuvieron como protagonistas a guardias privados. El reporte corresponde a la Federación Boliviana de Seguridad Privada (Febosp). 

Esta entidad empresarial reúne a aproximadamente 300 empresas del rubro en el territorio nacional y da empleo a alrededor de 15.000 guardias privados. 

Pese a los datos del sector, efectivos de la Policía afirmaron que semanalmente, los “hombres de negro” cometen hasta cuatro delitos por semana; pero sus víctimas no los denuncian. 

Por ejemplo, Wilson Jurado Chura fue atacado por tres guardias privados a la salida de una peña de El Alto; le robaron su celular y su billetera, pero no presentó una denuncia porque estaba ebrio al ser asaltado. 

La víctima lamentó que “cuando estás borracho, la Policía no ayuda, no auxilia, y menos quiere atender. Reconocí a dos guardias de seguridad privada, sin embargo nadie hizo nada”.

En cambio, Salomé C., que baila kullaguada en la fiesta de Gran Poder, contó que el pasado año fue víctima de un guardia de seguridad privada, que le quitó cerca de 5.000 dólares en joyas. 

Seis de la mañana. “Pedro”, a quien nombraremos así por reguardar su integridad, se encuentra listo para salir de casa y realizar su trabajo. Es policía de seguridad privada en una corporación de renombre.

Ataviado en su uniforme de la corporación, sale de casa acompañado de su esposa e hija para dejarlas en su trabajo y la escuela, respectivamente.

Ellas no están muy de acuerdo con su trabajo, pero él dice que lo hace convencido, “porque me gusta servir a los demás y esto se hace por vocación”, aún cuando tiene que realizar una jornada de 12 horas de trabajo contínuo por 12 horas de descanso, pero en ocasiones efectúa guardias para tener un ingreso mayor, dado que su salario es bajo.

“Al mes ganamos mil 900 pesos y en caso de doblar turnos juntamos dos mil 100 pesos, para medio sobrevivir, pero para eso debemos trabajar horas extras”.

Señala que cuando su quincena se ve más afectada es cuando falta, pues por ausencia le descuentan hasta 800 pesos, lo que merma más se economía.

Al llegar a la empresa donde presta sus servicios, su tarea es verificar la entrada y salida del personal, el equipo que se maneja, el que se traslada, en fin, hasta debe elaborar una bitácora de las actividades que se hacen día con día.

Uno de los grandes problemas a los que se enfrenta, al igual que decenas de policías de empresas privadas, es la falta de capacitación y de equipamiento.

Hace dos años Joaquín López Dóriga narraba en su programa de radio que al entrar a la zona de revisión de seguridad del aeropuerto de la Ciudad de México, se encontró con que la persona de la compañía de seguridad privada que estaba en el punto de revisión, estaba actuando de forma altanera y excediéndose en el trato hacia los pasajeros. Joaquín mostró su inconformidad por el trato que recibió de la señorita de seguridad, quien le respondió “yo soy la autoridá”, a lo que Joaquín respondió “no, usted no es la autoridad, él es la autoridad” señalando a un agente de la Policía Federal que estaba frente a ellos.

El domingo pasado se publicó una nota en un periódico local de la ciudad de León en la que se narraba que los colonos de los fraccionamientos de la zona norte de la ciudad, la más pudiente, estaban invirtiendo en sistemas de video vigilancia y de seguridad para poder prescindir de la Policía Municipal, y ellos mismos hacerse cargo de la seguridad de sus fraccionamientos con cuerpos de seguridad privada.

Yo celebro que quienes puedan reforzar su seguridad, lo hagan, de hecho es una tendencia creciente que los individuos y empresas compren cámaras de seguridad y sistemas que desalienten a la delincuencia a cometer delitos.

El occiso fue identificado como Pedro Pablo Ramírez Lucas, mientras que el nombre del otro agente no se conoce y fue trasladado al Hospital Nacional de la localidad.

Según las pesquisas los atacantes sospechaban sobre el traslado de dinero del Registro Nacional de Personas (Renap), sin embargo, el vehículo no transportaba valores.

 

FUENTE: www.prensalibre.com

En 30 días se elegirá un nuevo rector para la Universidad Santiago de Cali. El anuncio fue hecho un día después de que Heberth Celín Navas diera “un paso al costado”, lo que permitió el retorno de la normalidad académica a la institución.

Javier Barreto, presidente del Consejo Superior de la universidad, precisó que Celín no renunció y tampoco fue despedido. “El consejo aprobó un acuerdo político con connotaciones laborales, jurídicas y económicas”.

También explicó que no es cierto que el ex rector vaya a recibir $2.500 millones por alejarse del cargo, como se rumora. “Él tenía un contrato hasta el 31 de diciembre del 2014, sin embargo, después del arreglo se concluyó que se le pagaría el sueldo hasta el 31 de diciembre del 2012. Así las cosas, supongo que recibirá una cantidad cercana a los $240 millones”, precisó.

El docente agregó que además de la elección del nuevo rector se buscarán los cambios admnistrativos que reclaman los estudiantes que lideraron las protestas entre el lunes y el miércoles. Sin embargo, Freddy Riascos, uno de los universitarios que participó de la toma del bloque administrativo, reiteró que “la salida de Celín no es suficiente. Es más, realmente lo que queremos son cambios verdaderos”.