Con el propósito de garantizar la seguridad del Mundial de futbol Sub-20, que inicia este 29 de julio en el país, 4.514 guardas que prestan sus servicios de vigilancia y seguridad privada en las ciudades sedes del Campeonato, apoyarán a la Policía Nacional para reforzar los esquemas y protocolos de seguridad que se implementarán durante el evento deportivo.

Las 75 empresas de vigilancia y seguridad privada que se encuentran vinculadas con la Fuerza Pública a través de las Redes de Apoyo y Seguridad Ciudadana –RASCI- servirán de canal para la detección y prevención de amenazas en los sitios de mayor vulnerabilidad como son aeropuertos, terminales de transporte, hospitales, clínicas, sitios turísticos y centros deportivos.

De los 4.514 guardas de seguridad que prestarán apoyo en las ciudades sedes, el 27,5% corresponde a Bogotá, seguido de Armenia con el 13%, Manizales con el 12,2%, Barranquilla con 11,6% y Medellín con 11,3%. Completan el grupo las ciudades de Cali, Pereira y Cartagena con el 11%, 10% y 4%, respectivamente.

El personal de vigilancia y seguridad privada que apoyará la labores de seguridad para el evento mundialista, contará con más de 1.850 equipos de comunicación, entre radios portátiles, teléfonos celulares y avanteles. Así mismo, habrá grupos especializados para control vehicular y con caninos, y alrededor de 1.000 guardas contarán con armas como dotación para fortalecer el esquema de seguridad con la PONAL.

“El Gobierno Nacional agradece el compromiso de las empresas del sector vinculadas con la seguridad del Mundial. Estoy convencido que el trabajo mancomunado entre los servicios de vigilancia y seguridad privada y la Fuerza pública, permitirán que el Mundial de Futbol se lleve a cabo en condiciones de normalidad, durante los 22 días de actividad deportiva”, así lo señaló el Superintendente de Vigilancia y Seguridad Privada, Luis Felipe Murgueitio Sicard.

FUENTE: www.radiosantafe.com

Capital Federal - Sigue detenido el hombre que mantuvo como rehenes durante dos horas a sus hijos en una casa del Barrio Norte platense. El Grupo Halcón ingresó a la vivienda, de 37 entre 6 y 7, rescató a los niños y detuvo al hombre.Por radio Continental, César Melazo, juez de Garantías de La Plata, aseguró que el hombre “estaba alcoholizado y drogado. Tiene antecedentes de violencia y adicción” y “trabajó de seguridad privada en un boliche”, enumeró. En tanto, por radio La Red, el ministro de Seguridad bonaerense, Ricardo Casal, elogió "la profesionalidad con la que actuó el Grupo Halcón y toda la Policía".

En Magdalena Tempranísimo, por Continental, Melazzo exhortó a “investigar el acceso que existe a las drogas con tanta impunidad”, y consignó que “los menores fueron tratados por psicólogos y salieron de la casa en un auto no identificado”.

Por otra parte, en "Mañana Sylvestre", por radio La Red, el ministro de Seguridad, Ricardo Casal, contó: "justo ayer estaba a dos cuadras del lugar, así que llegué muy rápido. Era una situación muy difícil, un pasillo de muchos metros en un departamento PH en el mitad de manzana. Llovía mucho, y sin embargo, después de que las negociaciones se agotaron, el Grupo Halcón actuó con mucha profesionalidad, como toda la Policía. Una vez que los chicos estaban en una habitación diferente a la del adulto, se ingresó y en 30 segundos se logró resolver una situación muy compleja".

"No terminó nadie herido, ni los chicos a quienes se cuidó todo el tiempo, como tampoco al padre, a quien se lo detuvo y está a disposición de la justicia", contó el funcionario.

"Nuestros equipos están muy preparados, incluso para participar en resolución de estos temas de v iolencia familiar", dijo Casal, que además es vecino de la ciudad de La Plata.

FUENTE: www.impulsobaires.com.ar

Una simple amonestación fue el motivo por el cual un guardia de seguridad privada ultimó a balazos a su supervisor la mañana de ayer en la colonia San Miguel, al oriente de la capital.

Juan Finlander Cabrera Ortiz, de 28 años, falleció en la sala de urgencias del hospital Escuela de dos balazos en el cuello que le infirió un compañero cuyo nombre no fue dado a conocer.

Agentes de la Dirección Nacional de Investigación Criminal (DNIC) se presentaron a la escena del crimen a realizar las averiguaciones preliminares orientadas a conocer los pormenores del sangriento suceso.

Relación de hechos

Un doliente reveló en la morgue capitalina que alrededor de las 8:30 de la mañana Cabrera Ortiz llegó a una cooperativa que funciona en el sector a entregarles las armas a los guardias que iniciarían su turno.

Frente a sus demás compañeros llamó al autor material del crimen para exhortarle a que se corrigiera la camisa que la andaba mal puesta, por lo que él sacó su pistola de reglamento y le disparó a quemarropa, infiriéndole tres tiros en el cuello.

Cabrera Ortiz fue auxiliado y trasladado de inmediato al principal centro hospitalario capitalino en un intento de salvarle la vida, pero expiró a los pocos minutos de haber sido ingresado.

FUENTE: www.elheraldo.hn

No todo el personal que labora en empresas de seguridad cuenta con el equipamiento necesario para enfrentar a la delincuencia

"Al escuchar el tiroteo, corrimos a cerrar las puertas del supermercado. Llevamos a la gente hasta un lugar seguro, y nos quedamos ahí esperando a que llegara la Policía", dijo Jorge Quinga. Él es guardia de seguridad de un local comercial ubicado en el barrio La Villaflora, en el sur de Quito, en el que se produjo el 25 de junio una balacera entre el personal que custodiaba el dinero de las ganancias del día y 10 antisociales. Como resultado, hubo tres heridos y un fallecido.

Los cuatro guardias del establecimiento no intentaron enfrentarse a los supuestos delincuentes; en lugar de ello, se pusieron a buen recaudo. La razón, según Quinga: los asaltantes cargaban armas automáticas y ellos, en lugar de pistolas y toletes, llevaban palos de escoba pintados de negro y chalecos antibalas en mal estado.

Luego de exponer que por el momento no hay en concreto en torno a un posible desarme de los policías de la sección comercial que tienen diversos servicios de vigilancia, seguridad privada en cada uno de los cinco municipios

Luego de exponer que por el momento no hay en concreto en torno a un posible desarme de los policías de la sección comercial que tienen diversos servicios de vigilancia, seguridad privada en cada uno de los cinco municipios, lo que significa que por ahora el Ejército Mexicano, dejará todo igual, el primer edil rosaritenes, Javier Robles Aguirre, expresó que “no hay dinero, no tenemos suficientes recursos económicos, por lo consiguiente, no se contempla posibilidad que por ahora se pudiera aumentar salario a los efectivos agentes de la policíacos, ni tampoco a los empleados administrativos tanto de sindicato, como de confianza”.

Así que todo esto, posiblemente podría hacerse realidad, pero hasta el próximo año cuando la economía, la liquidez de este gobierno se haya recuperado, fortalecido, mientras aunque uno quisiera, sería casi imposible hacerlo, expuso.

Con esta problemática que se busca solucionar, resolver cuanto antes, les es imposible por ahora poder otorgar un incremento salarial al policía, a los empleados de las demás dependencias de este gobierno a su cargo, indicó.

El presidente municipal, que ayer acompañado del subprocurador de Justicia del Estado en Rosarito, licenciado Rafael González Cervantes, del mayor de Infantería (retirado) Magdaleno Vázquez Luis, así como del director de la policía comercial, Alfredo Amaro Mata, del presidente del comité de seguridad ciudadano, licenciado, Ricardo Moreno Villa, del regidor Antonio Serret, presidente de la comisión de seguridad pública y de varios regidores, directores de área, del secretario general, del síndico procurador entregó al titular de la DSPM el cerificado de reconocimiento que les enviaba el gobierno del Estado por medio de la SSPE por ser el municipio más seguro, tranquilo de Baja California, lo cual le llenaba de orgullo y satisfacción esta distinción y por ende él también les reconocía y agradecía su buen desempeño, agregó que:

“Esa es la realidad, no hay dinero suficiente para nadie más, para ningún funcionario público”, prueba de ello es que cuando inicio esta administración se bajaron los sueldos, comenzando por funcionarios de primer y segundo nivel, manifestó.

Sin embargo, insistió en que para el año entrante que se presume podrían estar en mejores condiciones en este sentido, posiblemente podría otorgarse un incremento a los salarios de los elementos de la Dirección de Seguridad Pública Municipal, que ha sido una de las constantes peticiones de los oficiales y porque además lo consideran que es justo, necesario.

Respecto al caso de la posibilidad de que la autoridad militar proceda al desarme de los policías de la sección comercial en las distintas municipalidades, dijo que por ahora no hay propuesta concreta alguna, al menos hasta el momento, por parte del Ejército Mexicano, sin embargo si así fuera, lógicamente, serían respetuosos, acatarían al momento la disposición militar, expresó el primer edil, Robles Aguirre.

“No ha habido nada oficial donde se nos diga que se va a dar este desarme, incluso se comenta que no sería a todos”, simplemente se dejarían de brindar algunos servicios que da la institución policíaca como el de escolta a empresarios y al transporte de valores.

Robles Aguirre recordó que aún sigue pendiente una reunión que tienen programada los cinco alcaldes con autoridades del Ejército Mexicano y el gobernador de Baja California, reunión que se ha postergado hasta nuevo aviso y quizá en la misma se determine este tema.

En lo personal, como presidente municipal de Rosarito, el primer edil dijo no estar convencido del desarme y planteará cuando se llegue el momento, de la propuesta que al menos tiene el V Ayuntamiento de esta ciudad.

FUENTE: www.el-mexicano.com.mx