La Guardia Civil detiene a tres personas que vigilaban su centro de operaciones con cámaras Incautado un alijo de hachís y speed.
La desconfianza como norma. Ese parecía ser el lema de tres presuntos traficantes de droga, recién detenidos por la Guardia Civil, que habían dotado su centro de operaciones con cámaras de videovigilancia. El lugar elegido para esconder la mercancía estaba en la pequeña localidad de Curbe, un pueblo de colonización próximo a Grañén.
La investigación, denominada operación Secano, se puso en marcha el pasado mes de abril. Los agentes, del Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (Edoa) y del puesto de Grañén, seguían la pista de un grujpo que introducía sustancias estupefacientes en las comarcas de Monegros y La Hoya de Huesca, sobre todo cocaína, speed, hachís y marihuana.
PERROS DETECTORES El último episodico de las pesquisas tuvo lugar el pasado 2 de junio. Los miembros de la Benemérita registraron un vehículo de alta gama, ocupado por dos individuos, en cuyo interior aparecieron, ocultos en el respaldo de un asiento, dos kilos hachís.
A continuación, utilizando perros detectores, se llevaron a cabo sendos registros en dos viviendas de Curbe y Lupiñén. Se intervinieron otros dos kilos de hachís, dos kilos de cogollos de marihuana listos para el consumo, 270 gramos de speed, cuatro gramos de cocaína, cincop de gramos de MDMA, 12 dosis de LSD, un cultivo de 21 plantas de marihuana, 4.890 euros en metálico, tres balanzas de precisión, envoltorios y otros enseres para la distribución de la droga al por menor.
Todas estas gestiones condujeron a la detención de I. L. G.de 24 años y vecino de Monegros; O. S. N., de 30 años y residente en la misma comarca, y J. V. L., de 45 años y vecino de La Hoya de Huesca.
Las dilligencias, los detenidos y las sustancias intervenidas fueron puestas a disposición del Juzgado de Instrucción número 5 de Huesca, que dirigió la operación. El magistrado ordenó el ingreso en prisión de uno de los sospechosos, al tiempo que puso en llibertad a los otros dos tras imputarles un delito contra la salud pública. Los investigadores sostienen que los tres arrestados se encargaban de la introducción de drogas en distintas localidades del entorno de Huesca.
FUENTE: www.elperiodicodearagon.com