La Delegación del Gobierno en Valencia ha solicitado una serie de requisitos al Ayuntamiento de Torrevieja antes de estudiar la solicitud que ha cursado para autorizar la puesta en marcha el sofisticado sistema de videovigilancia Vyriato (Red de Vídeo y Radar Inteligente Asertivo Torrevieja). El municipio, tras contratar doce proyectos a nueve empresas distintas, ha ubicado 191 cámaras en puntos estratégicos del término municipal y 15 radares marinos. De esos equipos, 91 requieren de esa autorización porque el resto son de control de tráfico (fijos y móviles y de comprobación de matrículas) y sólo necesitan de un cartel de advertencia que indique que existe videovigilancia, además de garantizar que no serán empleadas para asuntos de seguridad ciudadana. 

Todo el sistema cuesta 1,7 millones de euros que se han pagado con el plan anticrisis del Gobierno y que debe de estar terminado antes del 30 de junio para cumplir con los plazos. Las videocámaras que necesitan de un control especial son las que estarán destinadas a la vigilancia del patrimonio municipal y las que se van a instalar para prevenir incendios y se sitúan en edificios públicos, el cementerio, iglesias, centros educativos y vías urbanas.

El secretario de la Comisión de Videovigilancia, Félix Calatayud, solicitó hace escasas jornadas a la Jefatura de la Policía Local, según documentación a la que ha tenido acceso este diario, que se especificara con detalle la identificación de quienes solicitan el permiso, los motivos que justifican la puesta en marcha de cada una de las cámaras, el número de las que "se van a instalar" -aunque hace meses que la mayoría están ubicadas-, la especificación de los edificios, lugares y planos de las mismas y la comprobación de que no grabarán sonido o, en caso de que lo hagan, "la justificación de su necesidad". También reclama que se demuestre que la gestión del sistema se realizará por la Policía Local, los tipos de cámaras y sus condiciones técnicas, además de los días y horas de grabación.

Colegios

El mismo organismo, que vela por el cumplimiento de la Ley de Videovigilancia (formado por un magistrado del Tribunal Superior de Justicia, un abogado del Estado, un miembro de la Federación de Municipios y Provincias y el citado secretario), aclara que, en el caso de los centros de enseñanza, el Ayuntamiento deberá aportar además certificados donde conste que no existe inconveniente en su instalación emitidos por el "organismo del que dependa, del director de cada centro y de las asociaciones de padres de alumnos".

 

Algunos centros escolares de Torrevieja se adelantaron al plan Vyriato hace un año y cuentan con un sistema de cámaras auspiciado por el Ayuntamiento. Los consejos escolares informaron sobre la iniciativa pero no se indicó que hiciera falta el consentimiento de las asociaciones de padres como recoge este informe. 

La comisión no pone pegas a las cámaras de tráfico. Lo que sí advierte la delegación del Gobierno es que no podrán usarse para seguridad ciudadana y que deberán regirse por la normativa que reclama que las ubicaciones estén indicadas a los vecinos. El tono de la misiva de la Comisión no anticipa en ningún caso la resolución que va a adoptar sobre este asunto, ni en ningún caso cuestiona el plan municipal. El Ayuntamiento ha procedido a cumplimentar esa solicitud con todos los datos que les han solicitado y ha asegurado que se preservan todos los derechos vinculados a la intimidad.

Los radares marinos, pioneros en el control de los movimientos

Durante estos días se están ubicando en algunos enclaves los radares marinos que, de forma pionera, el Ayuntamiento quiere emplear en Torrevieja para el control del movimiento de personas y vehículos. Los radares marinos son una herramienta que, hasta ahora, tenía una aplicación principalmente en inteligencia militar. La idea que impulsa su uso no es la de identificar a esas personas o coches, sino la de detectar algún tipo de pauta anómala, como un coche que circule a una velocidad mucho mayor de la permitida por el centro del casco urbano. 

Este sistema discrimina tres tipos de vehículos en movimiento: motocicletas, coches y camiones. El radar pretende registra cuándo los vehículos sobrepasan una determinada velocidad y, en esos casos, el sistema automáticamente hará girar la cámara de video de tráfico más próxima en dirección a la vía por la que va a llegar ese vehículo. Como el radar cubrirá un amplio espectro de varios kilómetros, dará tiempo más que suficiente para que se active el sistema y la Policía Local registre en la sala de control la incidencia. Estos radares son más baratos que los convencionales, llamados cinemómetros. D.P.

 

FUENTE: www.diarioinformacion.com