Un curso del nuevo sistema de artes marciales, orientado hacia personal policial y de seguridad privada, empezará a impartirse en septiembre en Zaragoza.

Las artes marciales españolas han aumentado sus disciplinas. Hace dos años y medio que Santiago Bango, una de las figuras del kick boxing más importantes de España, terminó de desarrollar el Bricpol. Significa Brigada de Competición Policial y es un sistema marcial nuevo que ahora se está introduciendo en Aragón gracias a Abel Uribe, un miembro de la Policía Local de Zaragoza, vigente campeón de España de esta disciplina, segundo en su reciente historia.

Precisamente, Abel Uribe, que además de ser campeón nacional de Bricpol ha conseguido medallas de plata en lightcontact de Aragón, bronce fullcontact de España FEK, es campeón Interregional y campeón de España de fullcontac a través de la Federación Internacional de Artes Marciales (FIDAM), está manteniendo conversaciones con el delegado de FIDAM en Aragón, Santiago Rodríguez para intentar poner en marcha el primer curso de Bricpol en nuestra comunidad a partir de septiembre, que sería impartido por el propio Santiago Bango.

Hasta ahora solo se han realizado entrenamientos esporádicos, dirigidos por el propio Abel Uribe y el director téncnico de la Federación de Lucha, y los resultados han sido satisfactorios, ya que desde Bricpol Aragón aseguran que han llamado la atención de practicantes de diversos deportes de contacto y otras artes marciales. Por el momento, hay cinco competidores volcados con este nuevo deporte en Zaragoza. En otras ciudades, como Burgos, Málaga, Madrid o zonas de Canarias y Portugal, están entrenando bricpol desde hace algún tiempo, practicado por miembros de cuerpos de policía o agentes de seguridad, mayoritariamente hombres, aunque algunas mujeres también han empezado a practicarlo, pero no en Zaragoza, de momento.

¿Qué es el bricpol?

El bricpol ha nacido como un sistema marcial que puede entenderse en el ámbito de la defensa policial y en la competición deportiva. Es una evolución del combate policial a la sociedad actual, puede aplicarse como defensa personal y está pensado ajustándose su competición a la legislación española. Solo puede ser practicado por personal de fuerzas y cuerpos de seguridad, tanto estatales como autonómicos y locales (policías, guardiaciviles, millitares), además de personal de seguridad privada, como vigilantes, porteros titulados, escoltas, etc.

Un combate de bricpol consiste en seis asaltos de dos minutos cada uno. La peculiaridad que hace atractivo a este deporte es que los competidores llevan roles. Uno hace de asaltante y otro de agente de seguridad. Durante el paso de los asaltos van cambiando los roles. Se usan tres armas: cuchillo simulado, un palo como arma contundente y un arma de fuego, cargada con diez balines de aire comprimido, haciendo que los espectadores disfruten de combates muy atractivos, llenos de acción. Los dos oponentes llevan mucha protección en torso y cara, para evitar lesiones. Puede practicarse en ring o en tatami, indistintamente.

El Bricpol no busca el KO, los luchadores buscan reducir al rival y ganar puntos con golpes y desarmes durante el combate, ya que un policía no busca la finalidad de noquear al asaltante o agresor. No es un estilo de combate propio, pero el mismo sistema de competición ayuda a hacer unas técnicas que potencia los conocimientos de los artistas marciales.

Por el momento, en España se ha podido ver combates de bricpol con escasa frecuencia (la cadena Eurosport ha retransmitido algún combate), pero se espera que, a través de acciones como el curso que podría empezar el mes que viene en Zaragoza, el bricpol vaya ganando adeptos y calando poco a poco en los aficionados.

FUENTE: www.aragonsport.com