Las negociaciones tripartitas con el Parlamento y el Consejo darán comienzo en el mes de junio. El propósito común es alcanzar un acuerdo definitivo a finales de 2015.
Los ministros, reunidos en el Consejo de Justicia, han fijado un planteamiento global acerca de la propuesta la Comisión sobre el Reglamento general de protección de datos. “Unas normas de protección de datos armonizadas y modernas contribuirán a una Europa preparada para la era digital y representan un avance hacia el mercado único digital de la UE” destaca la Comisión Europea.
En palabras de Andrus Ansip, vicepresidente responsable del mercado único digital, “me anima este avance hacia unas normas de protección de datos mejoradas y armonizadas. La protección de datos es un aspecto central del mercado único digital y aporta una base sólida para ayudar a Europa a aprovechar mejor servicios digitales innovadores como los macrodatos y la computación en nube”.
Por su parte, Vĕra Jourová, comisaria de Justicia, Consumidores e Igualdad de Género, asegura que “hemos dado un gran paso hacia una Europa apta para la era digital. Los ciudadanos y las empresas merecen unas normas sobre protección de datos modernas que sigan el ritmo de la evolución tecnológica más reciente. Unos altos niveles de protección de datos reforzarán la confianza de los consumidores en los servicios digitales y las empresas se beneficiarán de un único conjunto de normas en los 28 países. Estoy convencida de que podremos alcanzar un acuerdo definitivo con el Parlamento Europeo y el Consejo antes de finales de año”.
A grandes rasgos, el nuevo reglamento establecerá un único conjunto de normas en materia de protección de datos válido en toda la UE. “Las empresas se ajustarán a una ley, no a 28, lo que les supondrá un ahorro de casi 2.300 millones de euros al año”. Además, la Comisión Europea considera que esta nueva normativa beneficiará “especialmente” a las pequeñas y medianas empresas que verán reducir la burocracia. “Se eliminarán los requisitos administrativos innecesarios, como los de notificación para las empresas. Tan solo esta medida les ahorrará 130 millones de euros al año”.
El derecho al olvido se consolidará. “Cuando los ciudadanos ya no deseen que se traten sus datos y no existan motivos legítimos para conservarlos, el responsable del tratamiento los suprimirá, a menos que se pueda demostrar que siguen siendo necesarios o pertinentes. Los ciudadanos también estarán mejor informados de si sus datos han sido pirateados. El derecho a la portabilidad de datos facilitará a los usuarios la transferencia de datos personales entre proveedores de servicios”.
Además se dará mayores poderes a las autoridades nacionales independientes de protección de datos, que tendrán la potestad de multar a aquellas empresas que vulneren las leyes, y se creará una ventanilla única. “Las personas solo tendrán que tratar con la autoridad nacional de protección de datos y en su propia lengua, aun cuando sus datos personales se traten fuera de su país de origen”.
Fuente: ituser