Las cámaras de lectura de matrícula de coches, que se han instalado en varios puntos para controlar los accesos a la ciudad monumental de Cáceres, comenzarán a funcionar "a modo de prueba" durante esta Semana Santa para comprobar si el sistema informático reconoce las más de 1.100 matrículas que ya están registradas en la base de datos de la Policía Local.
De momento, no se va a proceder a sancionar, ya que entrarán en funcionamiento como una prueba piloto y ni siquiera se ha determinado si seguirán funcionando después de la Semana Santa, ya que todavía está en fase de aprobación el reglamento que articula el uso, las normas y las sanciones de este nuevo servicio.
El portavoz del equipo de Gobierno local, Valentín Pacheco, ha señalado este viernes en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno que el mecanismo ya está preparado y que se han registrado unas 1.100 matrículas, entre las que se encuentran no solo los coches de los residentes, sino de vehículos de seguridad como policía, bomberos o ambulancias, y coches institucionales.
En total se han recibido 780 peticiones de usuarios o residentes en la parte antigua para registrar sus matrículas, pero Pacheco ha especificado que muchas de ellas son por un periodo temporal de uso para realizar algún servicio concreto en la zona intramuros.
Respecto al reglamento que regulará este nuevo sistema de control de acceso que sustituye a los bolardos, que han sido retirados, y a las antiguas tarjetas, el portavoz ha explicado que ya ha pasado por la Comisión de Seguridad y ahora debe estudiarse en el Consejo de Seguridad Ciudadana para ver si se pueden incluir algunas apreciaciones.
Una vez se recojan estas alegaciones, el documento debe pasar otra vez por comisión antes de aprobarse en el Pleno para su entrada en vigor, por lo que la puesta en marcha definitiva del sistema de cámaras que restringe la entrada al público en general a la parte antigua no tiene todavía fecha concreta.
El nuevo reglamento para las actuaciones de tráfico en la zona de intramuros regulará también los aparcamientos y limita las zonas de carga y descarga, así como el acceso de vehículos pesados. Todo con el objetivo de controlar el acceso del tráfico rodado a la parte antigua de la ciudad y evitar estampas de plazas llenas de coches aparcados que afean el entorno.
Fuente: directoextremadura