Desde hace años los vecinos se vieron en la necesidad de contratar seguridad privada para evitar que los malvivientes de colonias cercanas siguieran destruyendo la plaza.

"Ya ni nuestros niños podían salir a jugar a la plaza porque había malvivientes que se metían a destrozar la plaza", comentó uno de los afectados.

Después de que se pusieron rejas en la entrada de la cerrada y que se contrató seguridad, los pandilleros dejaron de introducirse para hacer de las suyas; sin embargo, la plaza aún continúa destrozada.

En el área de los juegos infantiles se logran ver parches de pintura blanca que los mismos vecinos han puesto para tapar los rayones de los pandilleros.

A pesar de que la mayoría de los juegos fueron hechos con material de construcción, los malvivientes lograron destrozarlos y hasta el momento no han sido repuestos.

FUENTE: www.elsiglodetorreon.com.mx