Luego que se llevaran 2,7 millones de pesos de la sucursal de Santa Fe 1056 del Banco Credicoop, desde la Asociación Bancaria exigen a las entidades tomar medidas de seguridad. En contacto con el programa De 7 a 9, de Canal3, Carlos Rodriguez advirtió que "a veces en los bancos hay más preocupación por recortar los derechos de los trabajadores que por solucionar este tipo de fallas". En tanto, denunció que en la mayoría de los edificios "a partir de las 16 falta personal policial y de seguridad privada y son los empleados los que abren la puerta".

El robo millonario al tesoro del banco Credicoop ocurrió el viernes pasado en la tarde en pleno microcentro de la ciudad. Pasadas las 16 una moza de un bar céntrico llegó con el pedido de café para los empleados, el guardia le franqueó el ingreso y un hombre que simulaba operar uno de los cajeros automáticos del hall de ingreso desenfundó un arma y luego de empujar a la chica amenazó de muerte al custodio. En ese momento, aparecieron otros dos hombres armados.

"Es un hecho muy trascedente. Primero, porque ubica ciertas características delictivas en primera plana y segundo, porque expone ciertas fallas en la seguridad de este banco y de todos los bancos", expresó Rodriguez.

No es frecuente que en la ciudad se lleven a cabo delitos de esta magnitud y en este sentido, para los investigadores no cabe dudas que el hecho estuvo más que planificado y todo indica que se trataría de una banda que no sería de Rosario.

"Esto fue acompañado por un trabajo de inteligencia muy importante. Se llevó a cabo fuera del horario de atención al público", señalaron desde la Asociación Bancaria. En este sentido, instaron a las entidades bancarias a revisar las medidas de seguridad que no se están tomando para prevenir este tipo de delitos.

"En muchos casos se preocupan más por recortar los derechos de los trabajadores en lugar de invertir en seguridad", denunció. Y abundó: "El horario de merienda no puede ser a las tres de la tarde cuando se hace el arqueo de caja. Hay sucursales que después de las tres ya no cuentan con presencia policial o de seguridad privada y son los trabajadores los que abren la puerta".

Sin alarmas

Los primeros pasos de la investigación del robo al banco Credicoop, arrojaron que si bien se intentaron activar tres alarmas desde la sucursal ninguna sonó.

El periodista Héctor López, relató esta mañana en contacto con Radio 2 que lo curioso fue que "un guardia de seguridad quiso encender una alarma cuando los delincuentes ingresaron a la entidad bancaria, luego un empleado intentó activar otra y por último una empleada trató de encender sin éxito otra más ubicada en el piso de la zona de cajas".

En tanto, se comprobó que uno de los delincuentes –cuyo rostro fue registrado por las cámaras de seguridad– había estado tomando café en el bar de la esquina del banco, mientras que el vehículo en el que se trasladaban estuvo estacionado en una playa a unos 20 metros de la sucursal.

FUENTE: www.rosario3.com