Con casi 90 años de vida, sorprendió en los últimos días la presencia de agentes de seguridad privada en el Hipódromo Almafuerte. Apostados en los accesos al predio por calle Maciá, llamó la atención de los propios trabajadores y familias, y se produjo después del inédito e inusual operativo lanzado por la AFIP hace un par de semanas.

 

Según se confirmó a UNO, la medida fue dispuesta por grupo inversor –que reúne a Libertad, pero abarca otros socios–, ya que la comisión directiva de la entidad se enteró de la novedad a través de los trabajadores.

 

El predio ya fue transferido a los inversores, pero como contrapartida deben entregar el nuevo hipódromo en Oro Verde en condiciones de uso.

 

“No nos perjudica ni molesta ni nos afecta”, contó ayer a UNO el jockey Carlos Oroño. Pero no ocultó la sorpresa que causó la situación, tanto como el inédito operativo del órgano fiscalizador nacional, que desembarcó por primera vez en casi un siglo de vida de la entidad y de ocupación del predio.

 

Situación
En el marco de la situación por la urbanización de las 22 hectáreas en Paraná, Oroño ratificó la postura de los trabajadores y familias de no desalojar el lugar hasta tanto no esté concluida la obra en Oro Verde. “En los últimos días se aceleraron las obras” en la vecina localidad, planteó, pero recordó que el compromiso “siempre fue que el traslado se realizara con el nuevo circo hípico listo”.

 

De todos modos, aclaró que no pretenden oponerse a la transformación que se registrará en el actual predio “ya que no tiene vuelta atrás”, sino que reclaman que estén dadas las condiciones para el traslado al nuevo lugar.

 

FUENTE: www.unoentrerios.com.ar