Tania Castellanos, quien por su actividad comercial debe visitar varias colonias, expresó: “El problema más frecuente que veo en los guardias privados es que maltratan al público. La mayoría trata a los visitantes como si fueran delincuentes; no saludan, son prepotentes y no dan ningún tipo de información”.

Marvin López, otro afectado, compartió su experiencia en Kaminal Juyú I, zona 7: “Le dije el código de vecino de mi cuñado a la agente, pero ella lo apuntó mal. Se lo repetí, y cuando le entregué mi cédula me la tiró, y me insistió en que necesitaba la licencia de conducir”.

En algunos casos ha ocurrido que al protestar por el maltrato los agentes se llevan la mano al arma, para amedrentar a los visitantes.

Tanto vecinos como residentes solicitaron no mencionar a las empresas señaladas, por temor a represalias. Consultados los representantes de estas, se limitaron a decir que esperan denuncias, porque están dispuestos a resolver cualquier malentendido.

Seguridad a medias

Debido a la delincuencia que afecta al país, habitantes de la mayoría de colonias y condominios han instalado portones y contratado a empresas de seguridad privadas para que patrullen sus calles.

Sin embargo, a menudo se enfrentan a la prepotencia de los agentes asignados.

Lorena Guerra, viceministra de Apoyo Comunitario de Gobernación, afirmó que han recibido quejas de vecinos, mediante la División de Prevención del Delito de la Policía, sobre abusos de guardias privados.

“La Policía tiene una unidad que se encarga de supervisar a esas empresas. Cuando recibimos una denuncia, analizamos lo que procede en cada caso”, explicó Guerra.

Recomendaciones

La funcionaria recomendó a los vecinos que decidieron cerrar los espacios donde habitan que siempre mantengan la organización comunitaria.

“Eso les permitirá tener un acercamiento con la Policía y el Ministerio de Gobernación. Además, pueden tener orientación de cómo trabajar de manera comunitaria”, agregó Guerra.

A los encargados de contratar a las empresas de seguridad les aconsejó que verifiquen que los agentes privados estén capacitados en relaciones humanas.

FUENTE: www.prensalibre.com