Caracas FC listo con el operativo de seguridad para el clásico


1.200 efectivos resguardarán la seguridad de los fanáticos que asistían al estadio Olímpico de la UCV este domingo, para ver el encuentro entre el Caracas FC vs Deportivo Táchira, partido correspondiente a la jornada cinco del Torneo de Adecuación 2015.

Con el compromiso de ofrecer un buen espectáculo en el clásico del fútbol venezolano, dentro como fuera del recinto de Los Chaguaramos, el Caracas FC desplegará un gran operativo de seguridad, con el fin de que el público que asista disfrute del choque entre los dos equipos.

La mañana de este viernes la Institución roja informó que: “El operativo contará con aproximadamente 1200 efectivos de los entes públicos (Policía Nacional, Guardia Nacional y Policía de Caracas), aunado a los 300 miembros compartidos entre la seguridad privada y el grupo de protocolo que estará facilitando el ingreso a las instalaciones universitarias”.

El operativo comenzará desde muy temprano en las zonas cercanas al estadio. “Las adyacencias del Estadio serán tomadas desde tempranas horas de la mañana (Plaza Venezuela, Zona Rental, Los Chaguaramos y las estaciones de metro), así como también se custodiará la Calle de los Servicios”.

Las entradas para el clásico aún pueden ser adquiridas el día del juego. “Las taquillas del estadio abrirán a las 11:00 AM y el acceso al público se habilitará a partir de las 2:00de la tarde. Es pertinente recordar que el acceso al estacionamiento estructural será por la zona de las trincheras (parte baja de la plaza)”, informó el club.


Fuente: balonazos

"Cuidan" piratas a las industrias

IRREGULARES 3 DE CADA 10 EMPRESAS de seguridad

De cada 10 industrias que contratan empresas de seguridad privada en la entidad, tres carecen de normatividad y pese a ello concretan la relación laboral con la única intención de abaratar costos.

"Algunas industrias las contratan para abatir sus costos pero es un grave error", acusó el presidente de la Unión de Empresas de Seguridad Privada en la entidad, Mario Aguilar Becerril, al puntualizar que de cada 10 centros de trabajo 3 contratan a este tipo de empresas de seguridad, "Ya que si quieren contratar un servicio deben acercarse a la Secretaría de Seguridad Ciudadana", para que les informe sobre quienes de las empresas están autorizadas o también ante la Canaco para que éste organismo les facilite el padrón de registro de las 114 empresas que laboran con toda la normatividad.

Comentó en este sentido que en la entidad actualmente se tienen detectadas entre 20 y 25 empresas que ofrecen personal de seguridad privada, pero sin estar regularizadas, y mucho menos su recurso humano se encuentra capacitado.

Pero que pese a estas anomalías hay algunas empresas, dijo que recurren a su contratación para abaratar los costos ya que en promedio por cada elemento cobran cinco mil pesos mensuales, mientras que en las empresas formales es de ocho mil pesos.

Dijo que en estas condiciones además de contar con precios menores, son empresas que no pagan impuestos y finalmente terminan por lesionar el mercado de quienes si estamos regularizados y quienes los emplean lo hacen subrayó, "Es contratar gente que no tiene ninguna preparación ni capacitación y sí a los guardias no les dan las prestaciones, (de ley), pues lógicamente se dedican a medio trabajar".

Mario Aguilar, lamentó la proliferación de estas empresas informales de seguridad, ya que al mes en promedio en la entidad, informó, aparecen entre cinco y seis y de las cuales cuatro no cumplen con la normatividad lo que implica un riesgo para quienes los contratan.

Además, puntualizó, que ante la Junta de Conciliación y Arbitraje, este tipo de empresas de seguridad privada son las que más alto índice de demandas laborales tienen.


Fuente: diariodequeretaro

Los vínculos entre la seguridad privada, la policía y los ladrones

En medio del escándalo en Robos y Hurtos, surgió un documento en el que se describe una sugestiva conexión.

El negociado de la prevención privada. Un cóctel de guardias que portan armas de dudosa procedencia –a las que hasta alquilan a terceros– vinculados con la seguri dad oficial. Un entramado cada vez más complejo que, poco a poco, parece ir develándose a nivel judicial... Aunque despacio, como capas espesas, difíciles de separar para que queden limpias, intactas, sin impurezas.

En el medio de todas esta historia, la sensible división de Robos y Hurtos de la Policía de Córdoba, que es el área encargada de investigar todos los delitos contra la propiedad (robos, asaltos, arrebatos, tanto en la vía pública como en empresas, galpones y domicilios particulares).

Desde el 10 de junio a esta parte, Robos y Hurtos es el centro de distintas sospechas.

Existen al menos tres causas judiciales (dos en la Justicia provincial y otra en la federal) que tienen a uniformados en la mira, por supuesta connivencia con delincuentes.

En el marco de una de estos expedientes, La Voz del Interior accedió a un documento que por estas horas ocupa (y preocupa) a demasiadas miradas.

Se trata de un informe elaborado por un oficial de esta división, que en las intervenciones telefónicas a una banda de presuntos delincuentes que ofrecían servicios de seguridad privada simulando ser gendarmes en actividad, detectó que uno de los investigados mantenía una conversación asidua con una mujer que sería policía de Robos y Hurtos.

Agente que, al parecer, informaba a los sospechosos de los movimientos internos de esa área para prevenirlos de otros pesquisas o de allanamientos.

Sin embargo, según se presume en la fiscalía provincial de Distrito 3 Turno 7, a cargo de Raúl Garzón, esta información que surgía de las escuchas no habría sido aportada en tiempo y forma a la Justicia, sino que fue demorada de manera llamativa.

Lo mismo investiga, por cuerda separada, el Tribunal de Conducta Policial y Penitenciario, según informaron fuentes de la Jefatura.

Cuatro páginas

Se trata de un documento de cuatro páginas, que lleva la firma del oficial principal Oscar Alberto Copetti y que transcribe el contenido de distintos CD con intervenciones telefónicas (caratulados como CD 2, 3, 4, 5 y 6).

En esas páginas, Copetti describe las conversaciones por mensajes de texto que mantenía un hombre de apellido Barrionuevo, sospechado de ser uno de los líderes de la banda que pasó a ser conocida como “los falsos gendarmes”.

Se trataba de un grupo delictivo cuyos integrantes simulaban ser miembros de esa fuerza de seguridad (utilizaban uniformes verdes, además de armas, insignias y chalecos) para ofrecer protección privada en empresas.

Tres hombres y una mujer quedaron detenidos en septiembre del año pasado.

Pero jamás se supo, hasta junio último, que en las escuchas telefónicas se había registrado un diálogo telefónico que involucraría a una mujer policía y a uno de los sospechosos, en el que la uniformada le enviaba, al parecer, datos sobre los móviles de civil (no identificados) de la división, además de los lugares donde se iban a realizar algunos allanamientos.

Según se cree, esta policía sería la oficial Maribel Soria, que fue licenciada en junio, aunque, conviene aclarar, hasta ahora no fue imputada.

Copetti describió en estas cuatro páginas cómo los investigados manipulaban distintas armas de origen poco claro (se habla del “alquiler” de una itaka, por ejemplo), a qué empresas brindaban el servicio de seguridad privada –cuyos propietarios imaginaban que se trataba de gendarmes de verdad– y dio cuenta de sugestivos diálogos sobre allanamientos de los que habían sido alertados.

“La persona identificada con el nombre de Maribel es quien y por algún motivo (...) va a avisar los dominios y vehículos de personal de Robos y Hurtos y en qué momento se van a librar órdenes de allanamientos, información que finalmente fue otorgada a estas personas”, dejó asentado el oficial Copetti en su informe, siempre según el documento que ahora también se investiga.

En la página dos, Copetti informa que en otra intervención, asentada en el CD 5, se establece que el sospechoso recibe un mensaje de texto de un teléfono Nextel en el que se le indican tres patentes de autos, que coinciden con los vehículos no identificados de Robos y Hurtos.

“El dicente confirma –se lee en la página siguiente– que se refieren a las placas patentes de dos de los móviles policiales no identificables, que se encuentran bajo el cargo de Robos y Hurtos, coincidiendo las marcas, modelos, los dominios y sus respectivas matrículas internas”.

Causas

Ahora, este documento originó dos investigaciones en la fiscalía de Garzón.

Por un lado, determinar si es Maribel Soria la policía “infiel” o, en caso de no ser así, intentar identificar de quién se trata.

Paralelamente, la fiscalía debe esclarecer por qué se demoró la entrega de esta documentación con información tan sensible.

A partir de este punto, las versiones son contradictorias.

Por un lado, se indica que Copetti fue presionado por un superior para tapar a los policías que se cree corruptos.

Por otro lado, otras fuentes de Jefatura aseguran que no existió ninguna anomalidad y que todo se presentó “cuando fue pertinente”.

Hoy, Copetti está de licencia y la explicación oficial asegura que se trata de vacaciones.

Pero otros informantes con acceso a la Central de Policía sostienen que fue apartado hasta que se esclarezca si omitió informar a tiempo estos registros telefónicos.

Otra vez

No es la primera vez que Copetti aparece vinculado en diligencias poco claras.

Hace tres años, en agosto de 2012, el presunto traficante de drogas René “Chancho” Sosa fue absuelto por el Tribunal Oral Federal 1.

En los fundamentos del polémico fallo, los jueces remarcaron que no podían condenarlo porque existía una “duda insuperable” originada en un operativo con distintas cuestiones poco claras.

De manera textual, los magistrados reprocharon a los dos policías que habían realizado el procedimiento, los oficiales Oscar Copetti y Carlos Palaver.

Copetti dejó Drogas Peligrosas y pasó a una brigada del Comando de Acción Preventiva (CAP), y meses después recaló en Robos y Hurtos.


Fuente: lavoz

Policía frustra robo a camión blindado en San Martín

Cuatro agentes de seguridad privada resultaron heridos al no atender una señal de alto que la PNC les hizo al tener conocimiento que se había cometido asalto a un camión blindado, como en el que se conducían.

Cuatro miembros de una agencia privada de seguridad son investigados por la Policía Nacional Civil (PNC) por supuestamente intentar robar el dinero que transportaban en un vehículo blindado fingiendo que habían sido víctimas de un atraco.
El sábado por la madrugada la PNC recibió una llamada telefónica, sobre el robo de un camión blindado, por lo que montaron un dispositivo de seguridad en el kilómetro 17 de la carretera Panamericana, en la jurisdicción de San Martín, de San Salvador.
Según indagaciones policiales, los guardias de seguridad transportaban una cantidad no determinada de dinero desde la ciudad de Cojutepeque, y al llegar al referido lugar, los custodios de valores no atendieron la señal de alto, por lo que los efectivos policiales dispararon contra las llantas a fin de que el conductor detuviera la marcha.
El hecho sucedió en las primeras horas del sábado y por la oportuna intervención del Sistema de Emergencia del 911, el robo no se logró concretizar.
Los cuatro ocupantes del automóvil blindado resultaron heridos y llevados al Seguro Social de Ilopango, aseguró Comandos de Salvamentos, aunque se desconoce cómo es que obtuvieron las heridas, ya que el camión es blindado.
La situación se maneja con total hermetismo por la empresa que transporta valores y por la PNC y esperan dar mayor información conforme avanzan las investigaciones.


Fuente: lapagina.com.sv

Así será el operativo de seguridad del Caracas-Táchira

El estadio Olímpico de la UCV recibirá una verdadera fiesta este domingo, cuando el Caracas reciba al Deportivo Táchira, en lo que será una nueva edición del clásico del fútbol nacional.

Y para que esta fiesta no se vea empañada por el virus de la violencia, la directiva del cuadro capitalino dio a conocer este viernes el operativo de seguridad que será desplegado en el encuentro.

Repitiendo la fórmula de trabajo que realizaron en el último choque entre estos ambos equipos, el operativo para el duelo correspondiente a la quinta jornada del Torneo Adecuación contará con 1500 efectivos, que se encargaran de velar por la seguridad del partido.

De esos 1500, 1200 son personal de la Policía Nacional Bolivariana, Guardia Nacional Bolivariana y Policía de Caracas; en tanto que los otros 300 son efectivos de la seguridad privada que estarán repartidos en varios puntos del estadio.

El Caracas comunicó que este operativo tomará las adyacencias del recinto deportivo de la Universidad Central de Venezuela (Plaza Venezuela, Zona Rental, Los Chaguaramos y las respectivas estaciones de metro que ese encuentre en esa zona), abriendo las taquillas a las 11:00 AM y la entrada al público a las 2:00 PM.


Fuente: meridiano.com.ve