Para hacer frente a los efectos negativos que generan los altos índices de violencia en la operación de los restaurantes, la Canirac de Nuevo León ha comenzado la distribución de un manual de seguridad entre sus socios.
La medida busca que se mantenga la afluencia de comensales, y por tanto, que las ventas de dichos establecimientos no vayan a la baja, refirió el presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados, Jorge Guerrero.
Agregó que para este objetivo se inició la difusión de una serie de recomendaciones entre empresarios del ramo que
representa y que en las últimas semanas ha sido blanco de asaltos o robos, o bien, se ha convertido en la sede de algún hecho delictivo.
Entre algunas de ellas se encuentran colocar botones de emergencia y reforzar la colocación de cámaras de vigilancia a los alrededores de los negocios.
“Empezamos a repartir unos ma-nuales de seguridad a los socios de la cámara, les damos instrucciones para que proyecten mayor seguridad hacia los consumidores.
Por ejemplo, algunos que no tenían ya están poniendo botones de emergencia, además se han iluminado más los restaurantes en la parte de afuera, y en algunos se están instalando cámaras de seguridad.
Aparte estamos haciendo que nuestros trabajadores esten dando vueltas constantemente a los alrededores de los establecimientos para que cualquier cosa que vean fuera de lo normal lo puedan reportar inmediatamente.
Todo es tratando de que nuestros clientes se encuentren agusto y bien atendidos dentro de los restaurantes”, explicó.
Ligado a esto, el titular de la Canirac reconoció que el fenómeno de inseguridad ha provocado que la población modifique sus hábitos de consumo, incluso cenando más temprano de lo habitual.
FUENTE: www.elporvenir.com.mx