Imágenes captadas por las cámaras de seguridad del Ministerio Público (MP) revelan una supuesta vinculación laboral entre los abogados Ronald Valvert, esposo de la jueza Patricia Veras, y Telésforo Guerra, defensor del ex presidente Alfonso Portillo; sin embargo, en sus declaraciones de ayer se observaron varias contradicciones.
De acuerdo con Valvert, no han llevado ningún caso juntos. Sin embargo, Guerra fue enfático: “Nos contrataron a los dos para ver un caso en la Fiscalía de Delitos Económicos”.
Representantes de grupos sociales calificaron la relación de “tráfico de influencias” y señalaron una permanente presencia de conflicto de intereses que afecta al sistema de justicia.
La fiscal general Claudia Paz y Paz expuso que la jueza debió haberse inhibido porque eso le da independencia al estado de Derecho.
Luis Archila, presidente de la Corte Suprema de Justicia, subrayó que si existiera algún hecho de corrupción estarían dispuestos a investigar.
“No sabemos las circunstancias en que se encuentran las personas en ese video, pero aquí hemos lanzado una campaña de cero tolerancia a la corrupción y al tráfico de influencias”, dijo.
Relación profesional
Veras, vocal del Tribunal Undécimo que absolvió a Portillo, Eduardo Arévalo Lacs y Manuel Maza, ex ministros de su administración, afirmó que no existía ninguna relación entre ella, Guerra y su esposo. Sin embargo, minutos después refirió: “La relación de ellos creo que es profesional”.
Además aseguró que conoce a Guerra porque fue su catedrático en la universidad, y manifestó que no consideraba que debía haberse excusado —en el caso Portillo— porque no tiene ninguna amistad con Guerra.
“Yo soy la jueza, la que interviene como integrante del Tribunal, no mi esposo. [...] Lo que se aprecia —en el video— son tres personas en un ascensor; en el MP es un ambiente público. Lo que hacían allí, que lo expliquen ellos”, manifestó.
¿Sí o no?
Al ser consultados, Valvert y Guerra entraron en contradicciones. Guerra confirmó que habían actuado juntos en un caso, en la Fiscalía de Delitos Económicos, del MP, pero Valvert lo negó.
“No le iba a plantear nada de su esposa; no somos amigos, sino conocidos. Solo fuimos a ver el expediente, a hablar con el fiscal”, explicó Guerra.
En su oficina, Valvert manifestó: “¿Qué de malo tiene conocer a los colegas? No tengo ninguna relación profesional con él. No hemos actuado conjunta o indistintamente en un caso”.
Cuando se le indicó que Guerra había confirmado la actividad realizada por ambos en el MP, dijo: “Si yo le digo una cosa y él otra, entonces saque sus conclusiones”.
Ambos aseguraron haber tenido una relación de alumno y docente. “No hay conflicto de intereses. No tengo relación íntima con el licenciado Guerra. Las decisiones de mi esposa —la jueza Veras— son independientes de la relación familiar que tenemos”, aseveró Valvert.
Tráfico de influencias
Según Renzo Rosal, director de Incidencia Pública, de la Universidad Rafael Landívar, las imágenes solo muestran el nivel de compadrazgo entre abogados y el permanente conflicto de intereses, que afecta al sistema de justicia. “Lo que hace es sembrar profundas dudas de que en otros casos puede haber ocurrido lo mismo”, dijo.
Carmen Aída Ibarra, del Movimiento Pro Justicia, refirió que esas imágenes pueden ser la muestra de cómo una relación entre abogados puede derivar en tráfico de influencias y conducir a que se comprometa el criterio judicial de sentencia, por lo cual hay que investigar al respecto.
FUENTE: www.prensalibre.com