Las autoridades de la ciudad de Socorro, Texas, anunciaron esta semana medidas para tratar de evitar los accidentes en las líneas del ferrocarril que atraviesan esa localidad.
Esto a raíz de la polémica que desató la muerte de un niño de 14 años (Justin Alcantar) quien fue arollado por un tren de la Unión Pacific el pasado 17 de abril, mientras caminaba sobre los rieles.
Según dijo el portavoz de la ciudad, David García, “la policía estará patrullando esa zona”, como parte de una iniciativa de restricción denominada “cero tolerancia”.
A partir de ahora, “las personas que se encuentren caminando por las vías del tren recibirán una multa de hasta 200 dólares”, trascendió.
“Otra de las medidas que haremos efectiva en unos meses será la colocación de cámaras de seguridad por donde pasan los carros sobre las vías (cruceros)”, indicó, el juez de esa municipalidad, Alejandro Vidales.
En entrevista previa, García exteriorizó que “más de setenta trenes pasan cada semana por nuestra ciudad (10 trenes al día), por lo que las probabilidades de que ocurra un accidente son mayores”.
También sostuvo que cada día “como promedio” dos autos se ven implicados en situaciones de imprudencia, “con las cámaras tendremos evidencia de lo que realmente sucede en caso de una investigación”.
El portavoz de la ciudad de Socorro reveló que el costo de cada cámara de seguridad es cercano a los cien mil dólares, desembolso que será recuperado a partir de las multas que se impongan a los infractores viales que no respeten la luz roja de los semáforos dentro de los límites de aquella comunidad.
FUENTE: www.diario.com.mx