no de los abogados de Giovanni Ramirez, el sospechoso arrestado por la golpiza a un aficionado de los Giants en las afueras del estadio de los Dodgers, asegura que su cliente podría tener como coartada algo más contundente que el testimonio de su hija de 10 años.

Ayer, el jurista pidió una orden judicial en la Corte del Condado de Los Ángeles para obligar al Departamento de Policía de Los Ángeles (LAPD) recuperar y preservar como evidencia dos vídeos de cámaras de seguridad en Hollywood, filmados el día posterior al ataque a Brian Stow, que mostrarían a Ramírez con pelo en la cabeza.

Según el abogado Anthony Brooklier, esto probaría la inocencia de su cliente, ya que según el LAPD los testigos de la golpiza han sostenido que los dos atacantes eran personas con la cabeza rapada.

"Esto es extremadamente importante", expresó Brooklier en las afueras de la corte criminal. "Todo esto no tiene sentido y estas pruebas podría exonerarlo del caso", agregó.

Brooklier dijo que pese a que no obtuvo una orden judicial, la ciudad y sus abogados aceptaron preservar toda la evidencia que se recupere en este caso.

Los vídeos debieron ser grabados en un hotel Comfort Inn de Hollywood, donde Ramírez presuntamente se alojó un día después del incidente con su novia que viajó desde Las Vegas.

La cámara del hotel, así como la de una gasolinera contigua, tuvieron que grabar a Ramírez con el cabello crecido, dijo Brooklier.

"El se rasuró la cabeza un día después del incidente [del 31 de marzo] y eso muestra que no tenía idea de lo que estaba sucediendo", acotó.

FUENTE: www.impre.com