Las cámaras de seguridad del casino captaron el accionar de los trabajadores, quienes quedaron al descubierto.

Efectivos policiales de la Brigada de Investigaciones detuvieron durante la madrugada de ayer a dos croupiers del casino Golden Dreams, acusados de robar sistemáticamente a la empresa, ubicada en la peatonal Alberdi al 200 de la capital provincial.

Los infieles fueron identificados como Eduardo Jiménez (20) y Matías Ojeda (26), y los capturaron luego de un intenso seguimiento de su accionar.

La pesquisa comenzó luego de que recibieran un alerta de parte de las autoridades del local.

Los encargados habían detectado, a través de las cámaras de seguridad, cómo los dos empleados cometían su engaño. Los acusados sustraían fichas de ruleta, con un valor de $500 cada una, y luego las hacían cambiar en caja por terceros.

Modus operandi

Según se logró verificar, tras chequear las filmaciones desde distintas perspectivas de las cámaras de seguridad, la modalidad de los estafadores consistía en guardar las fichas en los puños del saco de Jiménez -que oficiaba de croupier, mientras que Ojeda -encargado de ese sector- tapaba con su espalda las cámaras cercanas.

Luego, el que se quedaba con los valores se dirigía hasta el vestidor que poseen los empleados y guardaba las fichas en su bolso.

Debido a esta situación, otros empleados que se percataron de las maniobras del dúo pusieron en conocimiento de la situación al gerente del establecimiento y a un representante de Enjasa (Entretenimientos y Juegos de Azar S. A.).

Las autoridades analizaron de inmediato las filmaciones del circuito cerrado de video y se percataron de la manera en que realizaban la operación los sospechosos.

Luego de analizar detenidamente las imágenes, el gerente del casino se comunicó con los efectivos de la Brigada de Investigaciones, quienes comenzaron la pesquisa.

Tras verificar sus conductas y de analizar cuadro por cuadro cada video, consultaron con el juez de Instrucción Formal 6, José María Alvarado Solá, quien ordenó la captura de los empleados acusados de estafa.

Además secuestraron dos fichas de $500 cada una, desde el bolso de Jiménez.

En diálogo con El Tribuno, una alta fuente policial indicó que se entiende que los implicados venían realizado la maniobra desde hace varias semanas y que sustraían fichas equivalentes a $1.000 por día, que hacían cambiar en caja por terceros que simulaban ser jugadores afortunados. Las pesquisas siguen para dar con él o los cómplices.

 

FUENTE: www.eltribuno.info