Si se logra financiamiento, las unidades del Gran San Salvador serían las primeras en contar con cámaras de vigilancia.

La alianza entre AEAS, FECOATRANS y la Unión de Rutas Urbanas lanzó ayer su primera propuesta, que consiste en colocar cámaras de vigilancia en el interior de las unidades de transporte para seguridad de empleados y los usuarios.

La iniciativa busca reducir los hechos delincuenciales en buses y microbuses, así como evitar los homicidios de transportistas.

Según los datos presentados en la propuesta, el proyecto tendría un costo de $42 millones, y comenzaría a implementarse en unas 5,000 unidades que circulan en el área metropolitana de San Salvador. “Aquí los buseros (porque nos confunden con los motoristas) estamos dando un paso trascendental”, aseguró Genaro Ramírez, presidente de AEAS.

Las empresas que apuntalan el proyecto son una compañía de origen Chino, llamada TCSP Americas, apoyada en El Salvador por Trade International. De acuerdo con los datos presentados, desde 2004 hasta 2010, los asesinatos en el transporte se han incrementado en un 1,500%. Aseguraron que solo en 2010 fallecieron 150 personas (transportistas y usuarios). Este año, las gremiales dan cuenta de 45 transportistas fallecidos.

Ramírez recriminó al Gobierno por no evitar estas muertes, y aseguró que buscar la seguridad no es tarea de los transportistas, sino del Estado.

Según se informó, la empresa TCSP Americas estaría dispuesta a asumir $15 millones de la inversión para la implementación del proyecto. Los transportistas buscarían el resto del dinero a través de los bancos.

Pero la implementación de este sistema significaría un aumento de $0.10 en la tarifa para las unidades que lo posean. Las empresas que proveen el servicio presentaron una encuesta en la que aseguraban que los usuarios están dispuestos a pagar. El presidente de AEAS afirmó que si la gente está dispuesta a pagar por su seguridad, “el Viceministerio de Transporte no tendría por qué oponerse”, a un aumento de pasaje.

“Sería una tarifa de seguridad aparte, no necesariamente para todos... el costo de seguridad no solo lo puede absorber el transportista”, afirmó Astrid Oyarbide, de Trade Internacional.

Por su parte, Catalino Miranda, presidente de FECOATRANS, aseguró que es viable implementar este sistema adaptado a la realidad del país: “Reduciríamos el índice de robo en las unidades, los ataques a los trabajadores y los atracos, que van 96”. Sin embargo, la inversión se plantea justo cuando una de las principales quejas de los transportistas es la falta de rentabilidad, que no les permite mejorar las unidades o darles un adecuado mantenimiento. “Comiendo frijoles y salteado, pero si estás seguro, creo que te sentís mejor como salvadoreño”, dijo.

Los empresarios no especificaron si comenzarán a implementar el sistema aún sin que el Gobierno autorice un incremento de tarifa. Confían en que una vez instalado el sistema, los mismos usuarios lo demandarán.

FUENTE: www.laprensagrafica.com