Después de ver el vídeo, los agentes comprobaron quién era el asesino y se quedaron sorprendidos por su edad. La identidad ha sido revelada después de que Gayle, conocido entre los miembros de la banda como Riot, cumpliera los 16 años.

Ahora al joven le espera la cárcel tras ser declarado culpable de asesinato por un tribunal de Londres.

Gayle no pudo escapar a la violencia en la que creció: su primo de 18 años mató a puñaladas a un abogado en 2006; su medio hermano formaba parte de una pandilla callejera que tiroteó a un hombre en 2004.

Cuando su madre abandonó a Gayle este se afianzó a la pandilla de los 'Kensal Green Boys', delincuentes juveniles del noroeste de Londres, que se convirtió en su familia.

Este grupo acumula una abundante colección de robos y atracos en los metros de la capital británica.

El joven no había tocado un arma de fuego y cuando surgió la oportunidad de hacerse de un nombre dentro de la banda no desaprovechó la ocasión de cumplir el encargo. Un miembro de alto rango dentro del grupo criminal recibió el encargo de ejecutar a la mujer, por orden de su ex marido.

La víctima tenía un hijo y estaba a punto de casarse con otro hombre. Así que el ex marido pagó a la banda desde Turquía para acabar con ella. El asesinato ocurrió el 21 de marzo del pasado año y todo ocurrió muy rápido.

Gayle tocó en el piso, donde se encontraba la mujer con su madre. Abrió la puerta la propia víctima que sin mediar palabra recibió un disparo a quemarropa en el pecho.

El joven sicario disparó con una escopeta con los cañones recortados y después del impacto dio media vuelta y desapareció.  Después se jactó del éxito de la ejecución con sus amigos. La policía aseguró que el joven no ha mostrado ningún signo de arrepentimiento.

FUENTE: www.telecinco.es