Las empresas que ofrecen el servicio de vigilancia privada aceptaron que, en los últimos meses, se multiplicaron los pedidos de presupuestos y por lo tanto también aumentaron las contrataciones de sus servicios. Esto sucede tanto en los comercios como en las casas de familia y también en las quintas de fin de semana.  

En forma paralela, las grandes empresas del sector no ocultan su malestar por la falta de control a firmas más pequeñas que no estarían cumpliendo con todas las “reglas”.  

“Se necesita un contralor más estricto, que ponga atención en los recibos de sueldo de los trabajadores”, ejemplificó uno de los empresarios.  

En el ambiente aseguran que cuando una empresa abarata los costos lo hace en forma general. Algunos explican que “muchas veces no se hacen los estudios psicofísicos o tampoco se piden los certificados de buena conducta”.  

Por eso, quizás, proliferan los guardias de empresas ignotas en comercios pequeños, de baja facturación, que no podrían llegar a invertir los 6.000 pesos que cuesta mensualmente en promedio tener una custodia privada.  

Entonces, en la fiebre por contratar un refuerzo que brinde mayor seguridad, aparecen los oportunistas. El panorama es tan complejo que una de las grandes empresas estaría mudando su personal a la vecina Santa Fe.    

Controles

Con la proliferación de pequeñas empresas, que ofrecen guardias de seguridad privada a precios muy accesibles, la competencia con las que están en regla llega a ser desleal.

   

Por eso los empresarios estarían gestionando un acercamiento con los representantes del Estado provincial y el municipal para que se corrija la situación. Tampoco sería sólo una cuestión tributaria, ya que uno de los gerentes confirmó a UNO que estarían contratando a “cualquier clase de elemento”. Lo que vuelve la situación bastante más peligrosa.  

Para minimizar errores, los especialistas aconsejan que “piensen a la seguridad como una inversión y no como un gasto”.  

Por otro lado, son varias las empresas que están pensando en realizar un fuerte desembolso en cámaras de seguridad (Ver nota relacionada) para mejorar el servicio y poder dar mayor claridad y tranquilidad al usuario que se decide a realizar la contratación.    

Las cifras

6.000 Pesos es, en promedio, es lo que cuesta la presencia de un guardia de seguridad privada que trabaje ocho horas diarias durante seis días a la semana, todo el mes. Los trabajadores tienen todos los aportes y gozan de vacaciones.  

50% Es lo que cobran las empresas que no están en regla. Una de las explicaciones es que el aumento de sueldo por las paritarias influye en forma directa al precio que se le cobra al cliente.    

El sistema de vigilancia con cámaras es muy costoso

Las empresas que se especializan en brindar el servicio de vigilancia privada también instalan circuitos de cámaras de televisión cerradas para aumentar el nivel de control en comercios, empresas y también en las casas de familias.  

En la firma líder del mercado paranaense detallaron que “todavía sigue siendo muy caro el verdadero sistema de vigilancia con cámaras”, por eso la demanda no es tan alta. En realidad el nicho de clientes que pueden llegar a tener en Paraná es muy chico si se compara con capitales de provincias más grandes.  

“Las empresas buscan tener un sistema de grabación de imágenes para tener registros de los últimos 15 o 30 días”, explicaron. La cantidad de archivo que se acumula es proporcional al precio.  

Los comercios más chicos muchas veces instalan equipos que no graban las imágenes y “sólo sirven para la persuasión de ladrones comunes”.  

Por eso las firmas que trabajan con equipos de alta gama saben que sus clientes no están en el gran público.  

Por otro lado reconocen que la “sensación” de seguridad que brindan los equipos de filmación sirve para mantener un estilo de vida aunque no más que eso.    

Nacional

En el país la demanda de este tipo de vigilancia creció desde fines de 2010 un 50%.  

Por eso las empresas se adaptan a esta nueva tendencia, que tiene que ver con el repunte económico que se observa en algunos sectores de la economía. Entonces, el sistema de cámaras de video se determina de acuerdo a las necesidades de los clientes. Un equipamiento compuesto por cuatro cámaras con la correspondiente instalación tiene un costo de aproximadamente 3.000 pesos.

 

FUENTE: www.unoentrerios.com.ar