A una semana de que inició un paro de maestros en Acapulco, debido a la escalada de violencia en el destino turístico, el gobernador Ángel Aguirre Rivero anunció hoy una serie de medidas de seguridad, entre ellas la instalación de botones de alarma y videocámaras, así como la colocación de retenes policiaco-militares en el perímetro de las escuelas porteñas.
Pese a que minimizó la protesta magisterial, al afirmar que la suspensión de actividades sólo se realiza en “cerca de 52 escuelas”, el mandatario estatal hizo un llamado a los maestros para que regresen a sus labores.
También pidió a medios de comunicación y sociedad denuncien ante la autoridad los delitos que se cometen en la entidad, pues consideró que “nada sería más triste” que lamentar un hecho como los que se han dado en otras regiones del país.
En rueda de prensa, Aguirre Rivero admitió que “todos resultamos vulnerables, desde el más alto funcionario hasta las amas de casa y estudiantes”, ante la escalada de violencia desatada por el crimen organizado.
Luego puso en duda la información que proporcionaron el lunes pasado los docentes porteños, en el sentido de que desde el 26 de agosto y hasta el 5 de septiembre se habían sumado al paro laboral más de 300 planteles, de los 550 centros educativos de nivel básico.
La protesta, que afecta a más de 30 mil estudiantes, es impulsada por al menos 5 mil trabajadores de la educación de la zona escolar Acapulco-Coyuca, debido a que están siendo víctimas de secuestros, robos y extorsiones de parte de grupos delincuenciales.
Mientras, el gobernador sostuvo que este conflicto tiene su origen en la distribución de un panfleto, donde un presunto grupo delictivo ordena a una trabajadora administrativa elaborar una lista con los nombres y salarios de los trabajadores del plantel escolar y quienes deberían entregar la mitad de su salario como pago por “derecho de piso”.
Aguirre Rivero reprochó: “Ese anónimo, que de manera irresponsable se difundió, no se le puede dar la importancia y trascendencia que ha tenido y que de manera perversa se ha difundido en algunos sitios de Acapulco”.
Sin embargo, anunció la puesta en marcha de patrullajes aéreos y terrestres, así como la colocación de “botones de seguridad”, cámaras de vigilancia y retenes policiaco-militares en las inmediaciones de planteles educativos ubicados en diversas colonias, como Ciudad Renacimiento, Emiliano Zapata, Libertadores, La Venta y Las Cruces, zona que ha sido convertida en escenario de confrontación entre las bandas criminales que disputan la plaza.
Dijo que pidió al secretario general de la sección 14 del SNTE, Emiliano Díaz, dialogue con los trabajadores del sector educativo porteño para que reanuden labores a la brevedad, debido a que las medidas anunciadas garantizarán la seguridad de los trabajadores para que desempeñen su labor.
Previamente, la secretaria de Educación estatal, Silvia Romero, y la directiva del SNTE en Guerrero anunciaron su intención de “ampliar y fortalecer” acciones para promover la cultura de la prevención y seguridad escolar.
La reacción de las autoridades ocurre a más de una semana del paro magisterial y a un día de que fueron colocadas tres narcomantas en distintos planteles educativos y oficinas administrativas de la SEG en este puerto, donde el grupo denominado La Barredora acusa al líder del Cártel Independiente de Acapulco (Cida) –y presunto primo del gobernador Ángel Aguirre–, Víctor Aguirre Garzón, de “cobrar cuotas” a los profesores porteños.
FUENTE: www.proceso.com.mx