En los últimos dos meses fueron profanadas unas 1500 tumbas en el cementerio judío de La Tablada, lo que motivó una reunión entre la AMIA y el Ministerio de Seguridad bonaerense para reforzar los controles de la necrópolis judía más grande de América Latina.
El secretario general de la mutual, Julio Schlosser, aclaró a Tiempo Argentino que se trataron de “hechos delictivos comunes”, ocurridos durante la madrugada, y descartó una asociación con sucesos antisemitas: “Se produjo un incremento violento de los robos, lo que es piezas de metal y de bronce. En una sola noche tuvimos 800 tumbas violadas, después 400 y a los otros días otras 300, lo que hace un total de 1500. Sobre todo arrancaron los marcos donde van las fotos y los porta floreros metálicos de bronce.”
FUENTE: www.elargentino.com