Nos miran y nos cuidan. Veinte distritos de la capital han instalado dispositivos. Otras comunas alistan compras, pero… ¿realmente sirven?

Para enfrentar la ola de delincuencia que hay en Lima, unos 20 municipios han decidido armarse con cámaras de seguridad. Cuantiosas inversiones y publicitados anuncios han recibido el respaldo de los vecinos, pero surgen las interrogantes sobre si ayudan a frenar el accionar del hampa.

Si bien es cierto que pueden contribuir a mejorar la seguridad ciudadana y a controlar el tránsito, las alcaldías deben tener en cuenta los puntos de mayor riesgo, así como las características del dispositivo. De lo contrario, de nada servirán.

El abogado Marco Tulio Gutiérrez, especialista en temas municipales, advirtió que cada alcaldía hace lo que puede en este tema, pues no hay reglamento o ley que determine los estándares que deben poseer las cámaras. Como es obvio, solo los distritos con mayor poder adquisitivo contratarán a especialistas para que los asesoren.

Según Gutiérrez, el Ministerio del Interior tendría que apoyar la iniciativa de los municipios. “Este sector también es el encargado de regular la formación de los serenazgos. Pero estamos frente a una de las instituciones más ociosas pues, en los últimos años, no han sacado lineamientos importantes en materia de seguridad ciudadana”, opinó.

Un informe del Instituto Peruano de Administración Municipal (IPAM) detalla que, en los últimos diez años, las municipalidades de la capital han invertido cerca de 1,300 millones de soles en equipos de seguridad ciudadana. Sin embargo, esto no ha contribuido a garantizar la tranquilidad pública.

Perú.21 buscó la opinión de los municipios. La mayoría de los 20 distritos que tienen estos equipos instalados refirieron que no siguen ninguna norma legal. Para hacer las compras recurren a asesores tecnológicos o toman en cuenta experiencias de otras ciudades del mundo como Nueva York, donde actualmente hay cerca de 10 mil cámaras.

QUE CUIDEN DE VERDAD. Es necesario destacar que no basta con colocar una cámara en lo alto de un poste. Se necesita de todo un equipamiento y soporte tecnológico muy complejo para su óptimo funcionamiento. Además, deben contar con protocolos de comunicación quepermitan integrarse a las centrales de la Policía y de los bomberos, entre otras instituciones.

César Cáceres, gerente de cuenta de la empresa Netkrom, indica que la instalación de este sistema de videovigilancia debe obedecer a una planificación adecuada con cada alcaldía y a un diseño que tome en cuenta los puntos más críticos de seguridad que tiene cada localidad.

UNA AYUDA. Las cámaras ayudan a luchar contra el crimen. Ha quedado demostrado con la captura de ‘marcas’ y de asesinos del volante, como en el caso del fotógrafo Ivo Dutra, donde las cámaras de Jesús María pusieron al descubierto la grave falta del chofer de transporte público.

La Policía también pudo recurrir a estos equipos después del asalto al café Starbucks de San Isidro. Las imágenes ayudaron a identificar a los asaltantes en su huida. Múltiples capturas de cogoteros en el Centro de Lima y en Gamarra, en La Victoria, fueron posibles gracias a estos videos. Pero las cámaras solas no sirven para enfrentar la delincuencia. Faltan más policías y estrategias efectivas.

FUENTE: peru21.pe