En Paraná dispondrán 80 cámaras para realizar tareas de control y prevención del delito. La administración del sistema estará a cargo de la Policía de Entre Ríos y el objetivo es extenderlo a otras localidades, aunque varias se adelantaron.
El dispositivo estaría operativo hacia fines de este año o principios de 2012, ya que antes habrá que realizar una diagramación estratégica para determinar los lugares dónde instalar los equipos, los trabajos de infraestructura correspondientes y poner en condiciones el edificio en el que funcionará el Sistema Integral de Seguridad Pública.Las cámaras callejeras transmiten diferentes acontecimientos que ocurren en las calles haciendo una especie de decodificación de la realidad desde una perspectiva policíaca. En algún punto representan una fuerte apoyatura tecnológica para enfrentar el problema de la inseguridad. Pero lo cierto es que este tipo de medidas agudizan el debate respecto de dónde se encuentra el límite entre lo público y lo privado.
El programa funcionará inicialmente en Paraná y sus zonas de influencia (San Benito y Oro Verde), pero luego se extenderá a otras localidades donde sea necesario reforzar las tareas de prevención del delito. Concepción del Uruguay, Concordia y Gualeguaychú aparecen en el esquema diagramado por la Policía.
Sin embargo, algunas localidades ya han incorporado este tipo de tecnología para controlar los accesos y algunos puntos neurálgicos; y otras están en vías de hacerlo. Concordia, Federación y Villa del Rosario, por caso, instalaron sus propios sistemas de cámaras de vigilancia; también lo hizo Tabossi, previa autorización para cambiar el destino del fondo de la soja; Viale solicitó un préstamo a la Caja de Jubilaciones Municipal y se apresta a comprar los equipos; mientras que Colón, Diamante, La Paz, Victoria, Villaguay, Chajarí, Crespo y General Ramírez tienen intenciones de hacerlo, de acuerdo con un relevamiento realizado por El Diario.
En tanto, la Policía Caminera ya avanzó con la instalación de un sistema para monitorear los movimientos vehiculares en las rutas entrerrianas y en los ingresos y egresos de la provincia, pero el objetivo a largo plazo es que cada puesto caminero tenga una cámara. En este caso, el sistema cumple una función de seguridad pero no controla, por ejemplo, la velocidad de los vehículos ni otro tipo de infracciones.
El sistema de vigilancia urbana es un recurso que se ha extendido en todo el país y varias localidades entrerrianas han incorporado estas herramientas con el objetivo de disuadir, prevenir y detectar actos vandálicos y delictivos en las calles.
El plan ideado por la Policía de Entre Ríos abarca a Paraná en una primera etapa, pero luego se extenderá a Concepción del Uruguay, Concordia y Gualeguaychú, y también habrá un camión de exteriores, con una central de administración, que podrá trasladarse a cualquier punto de la provincia ante situaciones de catástrofe.
Sin embargo, algunos municipios han avanzado, por su cuenta, en la instalación de sistemas de vigilancia urbana. “Las cámaras podrían ser de gran ayuda para la prevención del delito si se cuenta con un buen sistema técnico, una adecuada logística de distribución y están ubicadas en puntos estratégicos”, aseveró Massuh.
Por lo pronto, los municipios han implementado sistemas no tan costosos pero que les sirven para la prevención del delito. Para eso instalaron cámaras en la entrada de las ciudades y en algunos puntos neurálgicos, aunque se trata de sistemas de menor complejidad que el que tendrá la Policía.
De esta forma, Entre Ríos se sumerge en esa especie de sociedad policial que propone George Orwell, con ojos electrónicos vigilando durante todo el día lo que ocurre en la vía pública. Las cámaras se imponen en la cotidianeidad de la vida urbana y los ciudadanos son indirectos protagonistas de una especie de gran hermano posmoderno.
Proyectos en marcha
No pocas localidades entrerrianas han avanzado en la incorporación de tecnología como herramientas de prevención del delito. Concordia, Federación y Villa del Rosario ya disponen de este tipo de sistemas de vigilancia. En el caso de la capital del citrus hay cuatro cámaras, dispuestas por la Jefatura Departamental de Policía, y el mes pasado concejales se reunieron con representantes del Centro de Comercio e Industria para incitarlos a que costeen instalación y puesta en funcionamiento de nuevos aparatos.
Por su parte, la Municipalidad de Colón firmó recientemente un convenio con la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) para el desarrollo de un sistema de cámaras de seguridad para esa localidad. La casa de estudios tiene, desde hace varios años, un equipo de profesionales asesorando a municipios en este tipo de proyectos. En caso de ser aprobada la iniciativa se llamaría a licitación a las empresas interesadas en la venta, colocación y mantenimientos de los equipos de control.
En tanto, en Crespo y Chajarí la colocación de cámaras fue aprobada por el Concejo Deliberante y ya hubo contactos con los técnicos de la Policía de Entre Ríos para que brinden asesoramiento; mientras que la Municipalidad de Viale solicitó un crédito de 2 millones de pesos a la Caja de Jubilaciones Municipal para la renovación del parque automotor e instalación de ocho cámaras de seguridad urbana.
Reforzar la Prevención
El jefe de Policía, Roberto Massuh, aseveró que “Entre Ríos es una provincia tranquila y segura”, pero justificó la incorporación del sistema de cámaras de vigilancia urbana en la necesidad de reforzar las tareas de prevención del delito y destacó que aquellas localidades que han incorporado este tipo de elementos disuasorios muestran datos que dan cuenta de una baja en los niveles de delincuencia.
Las cámaras son del tipo domótica, es decir que pueden giran en 360 grados y ampliar el cuadro de alcance, tienen buena nitidez y alta definición. Así, serán un apoyo para el Sistema de Seguridad 911, que se implementaría en los próximos meses, y las imágenes que se capturen podrán servir en investigaciones judiciales.
En ese marco, técnicos de Telecom –la empresa adjudicataria–, de la subcontratista BGH y de la Policía de Entre Ríos, hicieron un mapeo de los posibles lugares donde ubicar los aparatos. La compañía tiene un plazo de 240 días para realizar todas las operaciones, que incluyen la puesta en condiciones del edificio donde funcionará el 911, el tendido de fibra óptica y la solicitud de autorizaciones y colocación de las cámaras.
“Se hizo un relevamiento de los lugares donde podrían instalarse las cámaras y luego se realizará una diagramación estratégica con fines de prevención del delito. La idea es determinar los sitios porque hay que hacer algunas obras de infraestructura y tendido de fibra óptica para que las cámaras puedan transmitir”, puntualizó Massuh.
La central funcionará en un edificio de las Cinco Esquinas, en el que se están realizando obras de ampliación y restauración. En el lugar habrá tres salas. Allí estarán las operadoras preparadas para recibir llamados, tomar notas y derivar los casos según la categoría de emergencia a otra sala de despacho en la que estarán visualizados alrededor de 250 objetivos con móviles y personal para atender las incidencias.
“El objetivo es administrar mejor los recursos. Las cámaras y los sistemas de comunicación están totalmente integrados, se podrá determinar de donde proviene la llamada y quien está más cerca para responder e inclusive habrá una psicóloga por turno para atender a personas que necesiten otro tipo de contención, previo a la llegada de los agentes”, señaló el jefe policial.
“Además, se podrá confrontar el mapa del delito diariamente, por hora y minuto a minuto, lo que permitirá elaborar mejor las estrategias de prevención”, acotó
FUENTE: www.analisisdigital.com.ar