El Programa Escuela Segura (PES) está dirigido a escuelas públicas de educación básica ubicadas en los municipios de mayor riesgo de las 32 entidades federativas en el país. En el caso de Jalisco, prioriza 22 municipios: Guadalajara, Puerto Vallarta, Lagos de Moreno, Acatic, Juanacatlán, La Barca, Zapopan, Tlajomulco, El Salto, Tequila, Zapotlanejo, Autlán, Tlaquepaque, Tepatitlán de Morelos, Ocotlán, Ameca, Acatlán de Juárez, Tonalá, Zapotlán el Grande, Colotlán, Tala y Chapala.

Los municipios fueron seleccionados por parte de 1a. Coordinación Nacional del PES, según datos obtenidos de la Secretaría de Seguridad Pública Federal sobre las localidades en las que mayor cantidad de denuncias se presentan por delitos ante los Ministerios Públicos del fuero común y federal.

Los objetivos del programa, como lo señalan la reglas de operación, son contribuir a mejorar el logro académico de los alumnos de escuelas públicas de educación básica mediante la gestión de ambientes escolares seguros, así como consolidar los planteles como espacios seguros, libres de violencia, delincuencia y consumo de sustancias adictivas, propicios para la formación integral de los alumnos. 

“Estos objetivos deben promover y fomentar la autogestión y la participación organizada de maestros, padres de familia y alumnos en la seguridad escolar a través de los Consejos Escolares de Participación Social”, informó la Secretaría de Educación Jalisco (SEJ) a través de una solicitud vía Infomex.

La realización de diagnósticos de violencia y delitos en comunidades o municipios no compete a la autoridad educativa; el PES se basa en los datos de índices delictivos y adicciones que las autoridades de Seguridad Pública y Salud de los tres órdenes de Gobierno proporcionan para brindar auxilio a los directores, maestros, padres de familia y alumnos, así como la asesoría necesaria por parte de la Coordinación Estatal en la identificación de los riesgos que afectan a la comunidad educativa, para la elaboración de sus agendas de seguridad escolar, que es el documento mediante el cual se desarrollan al interior de las escuelas las actividades que el programa promueve.

Como parte de las actividades, se promueve la autogestión e involucramiento de los Consejos Escolares de Participación Social en el análisis de la problemática que afecta a la escuela y sus alternativas de solución, dando el seguimiento y la asesoría necesarios para el cumplimiento del objetivo, indica la SEJ.


Cuatro años después


El programa Escuela Segura fue inaugurado en febrero de 2007 por el Presidente Felipe Calderón en la secundaria “Libertador Miguel Hidalgo”, en el municipio de Tlaquepaque. Cuando el titular del Ejecutivo federal arribó a la escuela ubicada en las confluencias de la Avenida Revolución y la calle Zalatitán, medios de comunicación dijeron que era la más conflictiva del país. 

Hoy, más de cuatro años después, su director, José Guadalupe Soto Ocampo, sigue reclamando: “Nos tacharon de una manera muy grave, deterioraron la imagen de esta escuela; si la escogieron es porque, según me dijo la SEP, era de las escuelas del programa que está más cercana a un aeropuerto”.

La secundaria “Libertador Miguel Hidalgo” ha cambiado de cuatro años a la fecha. A un lado se ubica la comandancia de Policía del Ayuntamiento de Tlaquepaque. En la puerta del plantel hay una de cuatro cámaras de video que han sido instaladas, cuyo monitor está en la oficina del director.

En el ingreso al plantel, los niños y adolescentes tienen que utilizar una credencial con un chip especial que les permite la entrada. El uniforme es opcional, “pero sí les pedimos mucho a los padres de familia su participación para crear identidad en los muchachos”. Y aun así, tienen materias pendientes. 

“El Escalera”, un niño que por seguridad ha decidido omitir su nombre, dice que dentro de la escuela no hay muchos problemas: “Las broncas son afuera, en el turno vespertino; vienen los de los barrios de allá abajo a asustar o a pelearse”. Este menor, moreno, de cabello chino y que cursa el tercer año, dice que varias veces ha visto que asaltan a los pequeños o asustan a sus amigas. “No sirve de nada la Policía, siempre que se quieren pelear lo consiguen; una vez le quitaron sus útiles a otro amigo nada más porque era del otro barrio”.


Ficha técnica

Principales acciones en Jalisco


“Guía básica para prevenir que las niñas y los niños sean víctimas de delincuencia, violencia y adicciones”: se ha entregado este documento a todas las escuelas que están incorporadas al programa para fomentar una cultura de prevención y, a su vez, contribuir a la mejora del logro académico.

“Guía básica para que los padres de familia participen en la seguridad de sus hijos”: se ha entregado este documento a todas los padres de familia que integran los Consejos Escolares de Participación Social, y en general a todos aquellos interesados en participar en la mejora académica de sus hijos y que buscan mejorar las condiciones de seguridad en las escuelas.

“Equipamiento de cámaras CCTV y capacitación para su uso a los planteles escolares”: se han equipado con cámaras de seguridad 100 escuelas que han sido objeto de robos y delincuencia logrando erradicar de las mismas estas situaciones.

“Manual de Seguridad Ciudadana”: se entregaron 16 mil 930 ejemplares de este documento, que contiene recomendaciones para fomentar la cultura de la prevención del delito al interior de los planteles, en el hogar y en las diversas actividades cotidianas que llevan a cabo padres de familia y alumnos; este documento se destinó a mil 693 planteles de nivel secundaria de todo el Estado.

Apoyos financieros directos a escuelas de educación básica para fortalecer la seguridad escolar en actividades plasmadas en su agenda de seguridad, lo cual permite que los mismos planteles sean los que identifiquen los riesgos que existen al interior y determinen acciones para resolverlos.


Numeralia

Capacitación de maestros


107 docentes capacitados en el seminario en Prevención “Conocer para Prevenir”.

649 docentes capacitados en el curso de mediación de conflictos.

14 mil 805 docentes capacitados en el curso de prevención de adicciones en nivel secundaria.

20 mil 193 docentes capacitados en el curso de prevención de adicciones en nivel primaria.

4 docentes tomaron el Diplomado en Derechos Humanos impartido por la Secretaría General de Gobierno del Estado de Jalisco; este diplomado se retransmitió a través del curso “Derechos Humanos y Educación en Derechos Humanos en Escuelas de Educación Básica” a seis mil 238 personas.

1,791 docentes y directivos capacitados en el curso de fortalecimiento de la cultura de la legalidad.



Para saber

Proyección

La meta para el ciclo escolar 2011-2012 es llegar a las dos mil 567 escuelas incorporadas al Programa Escuela Segura.


Crónica

Siete robos en dos semanas


Se llama Juan Rafael Urzúa Gómez y dice que está enjaulado, pero feliz. Son las 10 de la mañana en la escuela Secundaria Mixta 11 y este director de una escuela enclavada en el corazón de la colonia Lomas de Polanco, en Guadalajara, dice que su historia es “una cosa de locos”. Hace tres años llegó a dirigir una de las escuelas a la que peor le había ido en su imagen institucional. “Cuando llegué había salones con tres alumnos; no había nadie que quisiera estar aquí”.

Rafael Urzúa, un rojinegro confeso que tiene muchos afiches deportivos en su oficina, cuenta que apenas tenía un par de meses en el puesto cuando “se nos metieron a robar. Primero un fin de semana, los vecinos nos hablaron; de mi casa (en Zapopan) vine a ver qué pasaba, se nos metieron te digo; denunciamos. A los tres días otra vez, a la mitad de semana, otra… para acabártela de contar: en 15 días nos robaron siete veces”. Y se ríe, porque contar esa historia, él lo ha dicho, es una cosa de locos.

“Después de que nos robaron empecé a hacer reuniones con los padres de familia, con los maestros, con los alumnos; empezamos a apretar. Los papás decidieron comprar protecciones para ventanas y alarmas de seguridad, con los niños empezamos a decir que no era un robo a mi persona”, recuerda, aunque sabe que también se llevaron cosas que él había comprado con su dinero.

“Lo que les quería dar a entender era que si nos robaban en la escuela, les robaban también a ellos”, aclara.

De bigote ancho, gafas que le cubren las mejillas y unos vaqueros entallados, Rafael es un hombre cuyo rostro bien puede superar los 50 años de edad. Dice que no es por suerte que haya llegado aquí sino que fue él quien pidió el cambio de una escuela foránea, donde también era director. “Llegué muchas veces a pensar en lo que me había metido, sabía que era una colonia complicada, pensé en volver a pedir mi cambio; hasta que poco a poco se fueron dando las cosas”.

Está enjaulado, pero feliz. Su oficina tiene tres ventanales en los que los barrotes no le dejan ver con claridad el patio. En su mesa hay un monitor. Ahí se observa el movimiento de cuatro puntos estratégicos donde el Programa Escuela Segura ha instalado en el plantel cámaras de video. 

Dice que él quisiera comprar más videocámaras, “todas las que sean necesarias, pero menos en los salones. No queremos hostigar al niño, queremos que cuide sus cosas”.

Y es que en la Polanco, con su alta densidad poblacional que suma 35 mil personas entre las colonias Lomas de Polanco y Polanco Oriente, es una de las zonas olvidadas por los policías. 

“Cuando se nos metieron siete veces vinieron una o dos veces, luego ya no… dicen que  porque la ciudad es muy grande como para dejarnos una patrulla, pero yo nomás les pido vigilancia a la entrada y salida de niños”. 

Rafael cuenta que seguido llegan a la escuela niños asustados porque hay uno que otro “vago” que les pide dinero o que molesta u ofende a las niñas. 

También relata que con el Programa Escuela Segura a la Secundaria Mixta 11 le ha ido bien. Que en esos tres años de programa ya nada más se han metido una vez a robar. Que gracias a las aportaciones de los padres de familia ya tienen velador, cámaras, alarmas y dos perros. Que la presión académica ha funcionado. Que de tener salones de tres personas pasaron a salones de 35. Que los papás se involucran. Que los niños vienen a la escuela con más ganas.

“Es que los niños saben quién vende, quién fuma, quién inhala, quién raya las bardas, quién se mete a robar. ¿Para qué nos hacemos? Es mejor hablarles con la verdad antes de que ellos tomen la decisión de acercarse a las drogas y al vandalismo”. Como siempre, las cosas de locos siempre terminan por ser las más cuerdas.

FUENTE: www.informador.com.mx