Buscan ciudadanos parar ola de asaltosEn varias privadas o calles de la ciudad, los vecinos se organizan para instalar casetas, cadenas y cámaras.

 

El agrupamiento de vecinos para montar vigilancia o hasta cámaras de circuito cerrado en las zonas que habitan, ha sido una de las costumbres recurrente ante la oleada de violencia que los ha obligado a generar gastos hasta por 15 mil pesos mensuales para garantizar su seguridad.


Lo anterior de acuerdo a un recorrido por la ciudad de Villahermosa, donde el 82 por ciento de los casi 290 fraccionamiento que existen han optado por mejorar la seguridad en los conjuntos habitacionales o iniciar un proceso de vigilancia de sus inmuebles.


En colonias donde existen calles que literalmente se han fraccionado para una mayor seguridad, vecinos se han agrupado para la contratación de guardias de seguridad o la implementación de una pluma o cadena para controlar el acceso a los inmuebles.


En este caso, un vecino, tal es el caso como don Eduardo Baeza, al mes llega a desembolsar hasta mil pesos como parte de la colecta que se recoge y pagar a la empresa de seguridad privada, quien le facilita hasta tres vigilantes que cubren las 24 horas del día, oscilando hasta en los 12 mil pesos la contratación de este servicio.


Casos como éste se pueden encontrar en colonias como Gaviotas, en el fraccionamiento privada Grijalva, el cual cuenta con una caseta de vigilancia y un guardia de seguridad, aunque en mucho de los casos los pequeños locales, denominados puesto de control, corre por cuenta del contratista del conjunto habitacional y hasta instalan cámaras.


Ya ha sido víctima de la delincuencia


José de la Cruz Jiménez, quien logra el sustento de su familia con las ventas de su papelería, se ha visto obligado a invertir para mejorar la seguridad de su establecimiento, cerca de 15 mil pesos es lo que ha gastado para prevenir otro robo en su negocio.


Desde las rejas de su establecimiento, ubicado sobre la calle Independencia de la colonia Miguel Hidalgo, una de las más conflictivas en cuestiones de inseguridad se refiere, comenta don Chepe, como es llamado por sus clientes.


Antes de que me asalten me encierro


Yo tengo más de 30 años viviendo en la Carlos A. Madrazo, he visto de todo, pero gracias a mi Dios no me ha tocado un asalto o en algún tipo de problema, pero también tengo mis previsiones, después de las diez de la noche cierro mi puerta y meto mi carrito.


Responsabiliza a delincuentes de otros lugares de la inseguridad en su colonia, don José María Hernández Pérez, señaló que si bien no ha sido presa de la delincuencia, sí ha optado por resguardar su casa en lo que sólo ha gastado cerca de 2 mil pesos.


Vivo encerrada por la violencia que hay


Con su bebita de nueve meses de edad en brazo y desde el interior de su casa que es una fortaleza enrejada, Guadalupe Martínez Gutiérrez comentó que tiene que vivir encerrada en su casa, debido a la violencia que hay en la colonia Tamulté de las Barrancas.


“La verdad yo alquilo la casa, son como 3 mil 500 pesos lo que se paga y pos cuando llegué ya estaban todas estas protecciones, que fue lo bueno, ya que he visto un sinfín de asaltos y pleitos en la calle", narró la entrevistada.


A su consuegra la han asaltado 2 veces


A sus 80 años de edad y aún lúcida en sus comentarios, Micaela Leyva dijo dedicarse a las labores del hogar y vivir con su hija y yerno en Gaviotas, sin tener muchos objetos de valor; sí ha observado cómo su yerno amarra su moto con cadena para que no se la roben. Sentada a las afueras de su casa, localizada en Gaviotas, doña Mica, como es conocida entre sus seres queridos, dijo que ella no ha sufrido un evento de asalto, pero su suegra, la madre de su yerno, en dos ocasiones ha sido asaltada

FUENTE:TabascoHOY.com