Tres años después de que el Fondo de Vigilancia y Seguridad (FVS) y la Secretaría de Educación suscribieran un convenio para instalar un completo sistema de videovigilancia en 192 colegios públicos, la Contraloría de Bogotá advirtió ayer que dicha inversión, que ascendió a 16.196 millones de pesos, está en riesgo.
En un control de advertencia enviado al alcalde Gustavo Petro, el organismo de control cuestionó el hecho de que las cámaras aún no se han instalado en 92 planteles educativos, pese a que la mayoría de los recursos ya fueron desembolsados.
El sistema, adquirido por un contrato firmado en el 2010 entre el FVS y Verytel S.A., buscaba reforzar la seguridad en los colegios oficiales.
Del total de los 16.196 millones de pesos, 15.797 millones fueron aportados por la Secretaría de Educación y los restantes 400 millones por el FVS. “El estimativo de inversión por colegio era de 84 millones de pesos; sin embargo, a 31 de julio de 2012, solo se ha instalado el sistema en 100 colegios y los pagos ya alcanzan un valor de $11.378.5 millones (70.25%), de tal forma que para los 92 colegios faltantes, solo se cuenta con $4.817 millones”, señaló el contralor, Diego Ardila.
Otra de las irregularidades detectadas por los investigadores, según señala el comunicado, fue que hubo “sobrecostos” por 1.875 millones de pesos en la compra de los equipos y se adulteraron las declaraciones de importación.
Ayer, Natalia de la Vega, directora del FVS, le dijo a EL TIEMPO que ya se están supervisando los presuntos incumplimientos del contratista, y que el próximo lunes está citada una segunda audiencia por este tema. La Contraloría denunció que las cámaras no tienen conexión con la Policía, como se había pensado.