Las cámaras de seguridad ayudan a la policía salvadoreña a combatir a las pandillas callejeras MS-13 y Barrio 18

as autoridades salvadoreñas planean instalar más de 6,000 cámaras de seguridad en la ciudad capital de San Salvador y las zonas periféricas durante los próximos meses, para mejorar la seguridad pública.

Las cámaras ayudarán a las fuerzas de seguridad a monitorear y enfrentar la violencia generada por las pandillas, las organizaciones delictivas transnacionales y los delincuentes comunes, de acuerdo con lo señalado por Carlos Avilés, director ejecutivo de la Fundación Educativa para la Prevención del Consumo de Drogas (FORESEE).

“El uso de cámaras de video de vigilancia mejorará la eficacia de la aplicación de la ley contra el tráfico de drogas, la extorsión, el secuestro, la delincuencia común, el robo y otras amenazas emergentes”, dijo Avilés. “Fortalecerá la prevención (del delito) en San Salvador.”

El uso de la tecnología para combatir el crimen

La tecnología es esencial para las fuerzas de seguridad de cualquier país, dijo Avilés. Por ejemplo, Londres ha utilizado cámaras de circuito cerrado de televisión (CCTV) durante años para monitorear las calles de la ciudad.

Las nuevas cámaras se introducirán gradualmente, dijeron las autoridades. La primera fase comenzó el 20 de mayo, cuando las autoridades iniciaron la instalación de 360 cámaras de seguridad que la Policía Nacional Civil (PNC) usará para vigilar las calles de la ciudad en busca de actividad delictiva, según el Ministerio de Seguridad.

Cada cámara de vigilancia puede cubrir el mismo terreno que 22 agentes de la policía en patrullaje, comentó José Ricardo Perdomo, entonces Ministro de Justicia y Seguridad Pública, a los periodistas el día en que las autoridades comenzaron a instalar los dispositivos. Las autoridades instalaron muchas de las cámaras en las calles de entrada y salida de San Salvador.

“Anteriormente era más fácil señalar las áreas específicas que podrían ser peligrosas. Desafortunadamente, el delito se está extendiendo geográficamente”, señaló Avilés. “San Salvador, nuevamente, es una zona delicada.”

El gobierno planea la colocación de hasta 6,500 cámaras en la ciudad capital y zonas periféricas.

Las imágenes captadas por las cámaras de seguridad se pueden almacenar en una base de datos hasta por ocho años. Las autoridades podrán utilizar las imágenes para monitorear los delitos cuando se producen, para identificar posibles sospechosos y víctimas del delito y para verificar el registro de los números de matrícula de los vehículos.

Cada cámara tiene un alcance de unos 800 metros. La capacidad de las cámaras para cubrir grandes áreas de territorio permitirá realizar “patrullajes virtuales” al policía que monitorea las cámaras.

Las cámaras enviarán las imágenes al centro de mando y control central de la PNC. Las autoridades de la PNC monitorearán las imágenes para responder y enviar oficiales a los delitos en progreso y para reunir información de inteligencia.

Leer noticia completa

FUENTE:dialogo-americas.com