Las cámaras de seguridad hicieron un aporte muy importante a la investigación, las caras de los delincuentes quedaron registradas en las filmaciones. 

Las primeras imágenes del ingreso son difusas, los rápidos movimientos de los ladrones no permitieron que haya una toma clara de sus caras. 

Pero cuando uno de los delincuentes se paró frente a la caja para romper el vidrio con la maza, una cámara que estaba justo sobre su cabeza pudo retratar el rostro del ladrón que se llevó el dinero. Mientras que el otro delincuente, luego de reducir al policía de seguridad se paró en la puerta mirando hacia adentro de la entidad financiera, la cámara de seguridad que registra la entrada y salida de los clientes logró tomar una imagen nítida de su cara. 

El tercer delincuente, que estaba en la puerta también fue retratado, además fue reconocido por dos testigos. La policía trabaja con los retratos de los sospechosos, inclusive cree que no sólo sus caras, sino además el modo en el que operaron los ayudará a descubrir quienes son. Por los testimonios receptados en el banco, los dos que ingresaron a la entidad tenían tonada tucumana, mientras que el cómplice que los esperaba afuera sería santiagueño.

 

FUENTE: www.elliberal.com.ar