La red social fue la impulsora de una guerra sucia que tenía como objetivo al gigante de internet. Facebook contrató los servicios de una agencia de relaciones públicas para hablar mal de Google. La declaración oficial de la consultora.
La idea de la campaña era sencilla: la agencia se ponía en contacto con bloggers y periodistas para que investigaran supuestas denuncias en torno a violación de la privacidad de Social Circle, una funcionalidad de Google presentada en enero que permite reflejar los círculos de amistades de los usuarios.
En el correo en donde se invitaba a realizar la investigación se ofrecía ayuda para elaborar el artículo así como apoyo para difundirlo en medios como The Washington Post y Huffington Post.
Pero un blogger se negó a ser parte de ese intento de guerra sucia y dio a conocer todos los correos enviados por Burson-Marsteller en donde se le pedía que criticara la política de recopilación de datos de Google.
Se especulaba con que otros competidores de Google estuvieran implicados en la movida, pero finalmente facebook habría reconocido ante The Daily Beast que ella era quien había iniciado la campaña.
El portavoz de facebook justificó la campaña diciendo que su compañía está preocupada por la protección de datos debido a las actividades de Google en las redes sociales. Facebook no aprueba, además, los aparentes intentos de Google de utilizar datos suyos para algunos de sus servicios, agregó.
“Los americanos deben ser advertidos acerca de las intrusiones en sus vidas personales por parte de Google, que cataloga y difunde permanentemente sin permiso”, advertía el operador de Burson que llevaba adelante el envío de correos.
En declaraciones que reproduce la agencia de noticias AFP, obtenidas luego, desde facebook dijeron: "Ninguna campaña de calumnia fue autorizada ni deseada".
"En lugar de eso, queremos que terceros (blogueros y periodistas) verifiquen que Google, sin recibir autorización de los internautas recolecta y utiliza informaciones contenidas en las cuentas de facebook", agregaron.
La palabra de Burson
En una nota de prensa dada a conocer por la noche, la consultora dijo: “Ahora que facebook ha dado a conocer este tema, Burson-Marsteller está autorizado para confirmar que efectivamente manejó un proyecto para este cliente.
El cliente solicitó que su nombre se mantuviese confidencial, ya que sólo estaba solicitando se hiciera pública información que ya estaba disponible y que podía ser verificada de manera independiente por cualquier medio de comunicación. La información que se le presentó a los medios planteaba interrogantes razonables y de dominio público.
Sin importar el raciocinio, este no es un procedimiento habitual en Burson-Marsteller y va en contra de nuestras políticas. El proyecto, bajo estas condiciones, debió haber sido rechazado. Nuestra relación con los medios está basada en estrictos estándares de transparencia y este incidente destaca la importancia de apegarnos este principio”.
FUENTE: www.infobae.com